Un testigo declara que Nacho Vidal ejerció de chamán y proporcionó la droga a la víctima

La declaración de un testigo en el juzgado de Xàtiva incrimina a Nacho Vidal al manifestar que el actor ejerció como chamán y proporcionó el veneno de sapo bufo, presuntamente, en el ritual que causó la muerte del fotógrafo José Luis Abad. El amigo de la víctima compareció el pasado martes ante el juez que instruye la causa por un delito de homicidio imprudente.

El testigo convivía con José Luis en el mismo domicilio en Valencia y lo conocía muy bien, compartían despacho y hablaban de asuntos personales tras una relación de amistad que duró 20 años. La víctima le contó que el precio del ritual oscilaba entre 150 y 250 euros, según le había explicado Verónica J., prima del actor y otra de las personas detenidas por la Guardia Civil de Xàtiva.

Según el declarante, José Luis conocía a esta mujer porque ella diseña botas y el fotógrafo promocionaba el calzado en las imágenes de algunos reportajes de moda que publicaba en revistas, y por este motivo, le dijo que no iba a pagar la sesión de sapo bufo. La víctima también contó a su amigo que el ritual «era como un viaje espiritual para acabar con el estrés», y en ningún momento dijo que él tuviera que llevar el veneno de la piel de un sapo. Además, José Luis no sabía cómo conseguir esta sustancia alucinógena.

El testigo afirmó que Verónica le llamó por teléfono el 28 de julio de 2019 para decirle que su amigo había fallecido tras sufrir «un ataque al corazón» cuando paseaba por el monte. Como él sabía que la víctima había acudido a la casa de Nacho Vidal para someterse al ritual, pidió entonces a la prima del actor que le contara la verdad, y después de mucho insistir, le explicó que habían hecho la sesión con veneno de sapo y «se ha ido muy bien, estaba muy bonico...» (en referencia al fallecimiento de la víctima).

En su declaración, el testigo aseguró dos veces que José Luis le dijo que todo lo necesario para realizar el ritual lo iba a llevar el actor, incluida la sustancia alucinógena, y que tenía intención de grabar la sesión. También señaló que no tiene explicación que Nacho Vidal y su prima devolvieran a la familia la cámara fotográfica de la víctima sin la tarjeta de memoria, y no cree posible que su amigo se olvidara de colocarla.

Tras encontrar el vídeo del ritual en el móvil de José Luis, el declarante avisó a la hermana del fallecido para que entregara las imágenes a su abogado y la Guardia Civil. La secuencia de fotogramas ha permitido a los investigadores reconstruir los hechos. El vídeo muestra cómo agoniza la víctima mientras el actor dirige el rito con dos ayudantes: su prima y un amigo. Ninguno de ellos desveló que existían las imágenes cuando fueron interrogados en julio de 2019. Tras visionar los 22 minutos y 30 segundos de grabación, la Guardia Civil concluye en un informe que las tres personas investigadas actuaron con temeridad y grave desprecio a la vida. Tardaron mucho en llamar al 112.