Secciones
Servicios
Destacamos
J. MOLINS
VALENCIA.
Martes, 14 de mayo 2019, 00:26
Hay varios antecedentes de médicos que abusaron de la intimidad de los pacientes y compañeros en la Comunitat en los últimos años. El caso más reciente es el del facultativo de familia del centro de salud de Alfafar. El mes pasado el doctor fue detenido por presuntos abusos sexuales a cuatro pacientes durante las exploraciones en la consulta. Les realizaba tocamientos, pidiéndoles que se desnudaran sin motivo alguno, flirteando con ellas, o incluso tratando de obtener citas fuera de la consulta. Además, tiene antecedentes por posesión de pornografía infantil en 2017, por lo que fue investigado dentro de una operación de esta trama.
También hubo un caso en Castellón de un falso médico que instaló cámaras en los baños para grabar a sus compañeros del SAMU en 2011. La Conselleria de Sanidad lo apartó y lo excluyó de la bolsa de trabajo tras ser detenido por instalar cámaras ocultas en los baños de la Escuela de Enfermería y los vestuarios del Servicio de Urgencias. Su presunta intención no era otra que obtener imágenes obscenas de sus compañeros. La novia del falso médico, una enfermera de Castellón, descubrió los vídeos en el ordenador portátil y lo denunció ante sus jefes. Estuvo ejerciendo sin título cinco años tras colegiarse en Valencia y Alicante, un farsante que acabó detenido.
En Valencia, un facultativo fue condenado por abusos sexuales en 2003 por tocar el pecho a una joven, una acción innecesaria para examinarle un esguince cervical. Tuvo que pagar 4.800 euros. En la localidad murciana de Molina de Segura, muy próxima a Orihuela, en febrero de este año, dos mujeres denunciaron al médico de un centro de salud por abuso sexual, ambas por tocamientos y por fotografiarlas contra su voluntad. Fue detenido dos veces con pocos días de diferencia por ambos casos.
Y en varias localidades de la comarca de Camp de Túria, como Benaguasil, Ribarroja y l'Eliana, un joven argelino, tras fingir ser médico, abusó sexualmente en 2007 de seis ancianas de entre 68 y 94 años. Convencía a sus víctimas de que era un prestigioso médico del Hospital La Fe y se ofrecía para enseñarles una técnica de relajación.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.