Quién es Wafaa: las claves del caso de la chica desaparecida en Carcaixent

Wafaa, de origen saharaui, nació el 24 de enero de 2000, medía 1'60 metros, era de complexión delgada, tenía el pelo castaño y largo y los ojos negros. Soñaba con ser azafata de vuelo y le encantaban los idiomas. Y desde aquel día de otoño en el que la señal de su móvil desapareció para siempre no se había sabido nada de ella hasta que el 16 de junio de 2021 la Guardia Civil detuvo a un sospechoso en la localidad valenciana de Manuel.

El detenido, David, ha confesado que mató a la joven argelina y que arrojó el cadáver a un pozo. Los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil de Valencia han localizado ya el cuerpo de la víctima. La Guardia Civil cree que el crimen tuvo lugar el mismo día que desapareció la joven. La madre de Wafaa interpuso denuncia por su desaparición el 29 de noviembre de 2019.

Según las investigaciones, el detenido conocía a Wafaa y la había acosado, al parecer, porque quería mantener relaciones sexuales con ella, pero la joven no accedía a las pretensiones de David. Los agentes comenzaron a registrar la vivienda del sospechoso minutos antes de las cuatro de la tarde. David alquiló la casa con garaje hace un año aproximadamente en la calle Jaime I.

El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Fulgencio, manifestó en su día que en un primer momento se pensó que la desaparición de la joven había sido voluntaria después de ver cómo se habían borrado algunos mensajes de sus redes sociales. «Se cree que el caso de Carcaixent podría ser una desaparición voluntaria y no creemos que esta persona haya sufrido agresión alguna. No obstante, vamos a comprobarlo», dijo entonces. Días después, esta línea de investigación cambió y ya se comenzó a estudiar como prioritaria que la desaparición no era voluntaria.

Las investigaciones realizadas posteriormente se dirigieron hacia la hipótesis de que podría haber sido otra persona quien suplantara la identidad de la joven en internet para eliminar publicaciones realizadas por la propia joven.

Su madre Soraya asegura que «el error de mi hija fue confiar en su entorno». La familia no interpuso la denuncia de su desaparición hasta días después. Al parecer era habitual que Wafaa se ausentara varios días sin dar señales, pero esta vez el tiempo fue superior y su teléfono no daba señal.

La inactividad de su teléfono móvil durante muchas jornadas fue lo que empezó a preocupar a las conocidas de esta joven, «una chica muy alegre y a la que se veía mucho por la calle», explicó un vecino. Wafaa llevaba ya mucho tiempo sin ponerse en contacto con nadie. Demasiado.

También se rechazó en el inicio de la investigación que la desaparición de Wafaa pudiera tener que ver con el caso de Marta Calvo pese a que La Pobla Llarga está a menos de diez kilómetros de la vivienda de Manuel donde ocurrieron los hechos y durante los días en que Jorge Ignacio Palma estuvo desaparecido después de entregarse en el cuartel de la Guardia Civil de Carcaixent el pasado 4 de diciembre tras varias semanas en paradero desconocido.

Varios centenares de vecinos se han concentrado en repetidas ocasiones para respaldar a la familia y solidarizarse con una situación que, confíaban, pudiera tener un final feliz que, lamentablemente, no ha tenido.