Una fuga desesperada al amanecer
Óscar Beltrán de Otálora
Cuando la Policía española y su agente doble Jokin Azaola creían tener bajo control la operación de ETA para secuestrar a la Familia Real en Mónaco en 1974, el Conde de Barcelona altera sus planes. La banda llevaba meses preparando una compleja infraestructura con varios pisos y un barco en la Costa Azul. En su punto de mira, Juan Carlos y Sofía, invitados por Rainiero a una fiesta. El inesperado viaje de don Juan, que a su llegada a puerto saluda incluso a algún etarra que se le acerca, lo trastoca todo. Mañana, el desenlace de esta serie