
J. ANDREU
Lunes, 2 de enero 2012, 09:18
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Los usuarios del consultorio médico de la pedanía oriolana de Desamparados reclaman una mejora de las condiciones de acccesibilidad al local provisional que ocupa.
La queja se fundamenta en la inexistencia de una rampa para facilitar la entrada a las personas con movilidad reducida y también de las madres que llevan a sus hijos al pediatra, que se las ven y se las desean, comentan algunos pacientes, «para poder salvar el escalón de entrada al centro sanitario».
La reclamación, indican los afectados, es de fácil solución, con una rampa «que no tiene porqué ser de obra, basta con una rampa provisional que facilite el acceso a unas dependencias que usan a diario decenas de personas». La mayor parte de ellas son personas mayores, que acuden a por su recetas o a las citas con el médico o niños pequeños en silletas.
Precisamente la falta de una entrada accesible provocó que una señora de edad avanzada cayera en la puerta del centro el pasado viernes por la mañana, al no percatarse del doble escalón que hay. Además los vecinos también critican que se permita aparcar en la puerta o que sea el lugar donde los usuarios dejan sus motos o bicicletas, lo que todavía entorpece más si cabe el acceso al consultorio de la pedanía.
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