Un senderista muere tras caer al vacío en la sierra desde una altura de cien metros

La Sierra de Redován sigue deparando malas noticias para los amantes de la escalada y la montaña. Un hombre que practicaba senderismo el viernes por la tarde en las laderas del monte redovanense se precipitó al vacío mientras practicaba esta actividad por uno de los pasos más complicados de la sierra como es el paraje conocido como el Paso del Mono.

Los hechos ocurrieron poco antes de las siete de la tarde, cuando un hombre de unos sesenta años de edad y natural de la vecina localidad de Benejúzar se encontraba dispuesto a encarar el descenso en una zona agreste, cuando por un mal paso cayó desde una altura de cien metros, cuando iba acompañado de otro compañero que fue quien dio aviso a los servicios de emergencias.

Hasta el lugar de los hechos acudieron diversos efectivos de la patrulla de rescate del Consorcio Provincial de Bomberos, así como efectivos de la Guardia Civil de Callosa, agentes de la Policía Local y sanitarios, que desde la ermita ubicada a los pies del macizo montañoso comenzaron a montar el dispositivo de rescate. También acudió el primer edil de la localidad, Emilio Fernández, para interesarse por la salud del accidentado.

Una vez conocido el paradero los efectivos de rescate procedieron a activar el despliegue para el rescate del senderista, que fue hallado en estado muy grave debido a las secuelas de la caída. A partir de ese momento las tareas se centraron en conocer el estado del hombre, encontrado con un pulso muy bajo debido al accidente, según informaron fuentes municipales, y que a consecuencia de las heridas murió poco después. Hasta el lugar donde se encontraba el cuerpo descendieron montañeros del club de escalada del municipio, así como bomberos, que procedieron a ascender desde el barranco en el que fue encontrado hasta la cumbre, debido a las dificultades para hacerlo de forma inversa.

Los rescatadores se toparon con la dificultad añadida de la noche, que entorpeció que hasta el lugar del siniestro pudiera desplazarse un helicóptero para agilizarlo, por lo que decidieron encarar la cima y bajar a través de la ladera callosina. La fuerte complexión del senderista implicó que su traslado tuviera que hacerse entre varias personas.

Las tareas de rescate se prolongaron durante varias horas, hasta entrada la madrugada, en lo que ha supuesto el segundo accidente en la sierra redovanense en poco menos de un mes, ya que a finales de enero también tuvo que ser sacado de la ladera otro excursionista que se accidentó practicando escalada en sus paredes.