UN MARCAPASOS DIRECTO AL CORAZÓN

Los avances en la investigación han permitido que los marcapasos sean cada vez más pequeños y seguros y que se puedan implantar de forma menos invasiva. Este es el caso de Micra, cuyo nombre hace énfasis en su pequeño tamaño, todo un gran logro de ingeniería y de la denominada miniaturización, proceso tecnológico que intenta reducir el tamaño de los dispositivos electrónicos. Mide una décima parte que los marcapasos convencionales (como una moneda de euro) y no requiere el uso de cables que lo conecten con el corazón, porque el dispositivo manda impulsos eléctricos a través de un electrodo incluido en su interior. Una vez insertado en el órgano, queda unido a la pared del ventrículo gracias a unas 'púas'. Puede ser colocado de nuevo, si es necesario, y sus baterías tienen una duración de hasta 10 años.

Los actuales procedimientos de implantación de marcapasos exigen realizar una cirugía en el paciente. Sin embargo, este nuevo dispositivo no requiere de incisiones quirúrgicas en el pecho ni la creación de ninguna «bolsa» entre la piel y el músculo para poner el generador, como se hace ahora. Permite además ser implantado de forma mínimamente invasiva: se coloca directamente en el ventrículo derecho del corazón mediante un catéter insertado a través de la vena femoral, con una pequeña incisión en la pierna. Esto elimina las potenciales complicaciones derivadas del implante, como las infecciones, lo que reduce los costes sanitarios y minimiza el postoperatorio. Además evita que el dispositivo sea visible y perceptible al tacto, algo que da más tranquilidad y seguridad al paciente que se ve obligado a llevarlo.

Contra la braquicardia

Los marcapasos son dispositivos utilizados en pacientes que presentan braquicardia, una condición caracterizada por un ritmo cardiaco lento (menos de 60 latidos por minuto) o irregular. Así el corazón no puede bombear suficiente sangre rica en oxígeno al cuerpo durante la actividad normal o el ejercicio, causando mareos, fatiga, dificultad para respirar o desmayos.

El marcapasos ayuda a restaurar el ritmo normal del corazón y mejora esos síntomas, al enviar impulsos eléctricos para aumentar la frecuencia cardíaca.

Micra se está evaluando en un ensayo clínico que tiene prevista la participación de hasta 780 pacientes en aproximadamente medio centenar de centros. Se espera que los resultados iniciales de los primeros 60 pacientes, que han tenido un seguimiento de hasta tres meses, estén listos para el segundo semestre de 2014. Su desarrollador espera comenzar su comercialización durante el año 2015.