Chinches contra pulgones en Paterna

Paterna le ha declarado la guerra al pulgón. Este insecto devorador de hojas campa a sus anchas por numerosos árboles del casco urbano, especialmente jacarandas y cersis. Para combatir esta virulenta plaga, el Ayuntamiento ha puesto en marcha, por primera vez en el municipio, un curioso método de control alternativo y biológico a base de parásitos «antagonistas». Los chinches se enfrentarán a los pulgones en esta dura batalla.

Esta nueva población defensiva se desplegará por más de 300 jacarandas y cersis, árbol a árbol. Tres tipos de insectos antipulgón serán los encargados de pararle las patas a este molesto vecino.

Ayer por la mañana, técnicos de la empresa municipal Gespa ya soltaron varios centenares de 'anthocoris nemoralis', un chinche depredador de 'Psylas', 'trips', pulgones, ácaros, huevos de lepidópteros y polen.

Este insecto de cuerpo negruzco, alas y antenas largas, de apenas 2 o 3 milímetros, es un estupendo depredador cuando llega a su etapa adulta. Además, es por estas fechas cuando las hembras inician la deposición de huevos sobre los brotes de las plantas. Las larvas empiezan a desarrollarse depredando pequeños individuos como los pulgones. Este 'guerrero' antiparásito «es completamente inofensivo para el árbol y, por supuesto, para las personas», según explicaron ayer fuentes municipales.

Pero este no será el único 'bicho' utilizado en esta contienda. También se contará con la llamada 'mariquita de dos puntos', menos conocida como 'Adalia bipunctata'. Este es un coleóptero cucujoideo de la familia 'Coccinellidae', muy común en toda Europa occidental. Por su voracidad es utilizado también como agente de control contra los pulgones y Paterna ya ha contratado sus servicios.

Por último, también se utilizará la 'Aphidius colemani'. La hembra localiza y parasita eficazmente los focos de pulgón depositando un huevo en su interior. Una sola hembra «puede parasitar cientos de pulgones en tan sólo un par de días», explican fuentes municipales.

La suelta de esta fauna «útil» se desarrolla árbol a árbol, colocando una o dos cajitas repletas cada una con un centenar de parásitos antipulgón. El ataque se desarrolla de forma inmediata.

Equilibrio

Los técnicos encargados de la actuación explican que, «pese a que las plagas difícilmente se pueden erradicar completamente, con este tipo de fauna compensamos el mal que producen y establecemos una situación de equilibrio».

Este tipo de lucha biológica es «un sistema cada vez más utilizado en jardinería, porque es completamente inocuo para el ser humano y supone un aliado para el árbol en el que habitan». De esta forma, se evita el uso de insecticidas y productos más nocivos.

El teniente de alcalde de Infraestructuras, Alfonso Romero, recordó que mientras el uso de sustancias químicas «supone a menudo la erradicación de todos los insectos del árbol, tanto los beneficiosos como los perjudiciales, está práctica alternativa permite combatir sólo aquellas especies que se consideran enemigas del árbol en cuestión».

Paterna ya sufrió una plaga de pulgón parecida hace cuatro años pero en esta ocasión «ha vuelto con mucha fuerza, de ahí que se haya puesto en marcha este tratamiento con celeridad, que esperamos ofrecerá buenos resultados». El pulgón ataca principalmente en primavera y verano, sobre todo en condiciones de sequedad ambiental. Actúan clavando su pico en las hojas y chupándoles la savia.