Kiko Argüello recluta en Valencia a 200 familias para evangelizar en Asia

Más de 20.000 seguidores del Camino Neocatecumenal procedentes de varios países se reunieron ayer en Mestalla en un encuentro vocacional con los fundadores de este movimiento cristiano, Kiko Argüello y Carmen Hernández, presidido por el arzobispo de Valencia, Carlos Osoro. El acto, convocado para reclutar a jóvenes y familias dispuestas a marcharse a evangelizar a Asia, concluyó con la respuesta de 200 familias y 400 jóvenes -algunos niños- que se ofrecieron como voluntarios para participar en misiones en países como China, Vietnam, Tailandia, Laos o Singapur.

Al encuentro, que contó con la asistencia de los obispos de Ibiza y Castellón, asistieron comunidades de 'kikos' -nombre con el que se conoce a los seguidores del camino, en alusión a su iniciador- de Francia (300 personas), Italia (5.000), Holanda, Bélgica o Luxemburgo, entre otras. Entre las españolas, tras los 6.000 fieles de Valencia, la comunidad más numerosa fue la de Murcia (4.000 fieles), aunque también acudieron seguidores de Cataluña, Aragón, Castilla-La Mancha, Madrid o Islas Baleares.

Fue en el tramo final de un acto que se prolongó durante más de tres horas cuando el iniciador del movimiento pidió vocaciones de familias y jóvenes que respondieran a la «llamada de Dios» para predicar el Evangelio. «Necesitamos 20.000 sacerdotes para China, donde no hay ninguna presencia de Cristo porque están educados en un marxismo ateo. Nos están esperando. Si Dios te llama, enhorabuena», aseguró.

Previamente, durante sus más de dos horas de discurso, aseguró que el «mayor peligro» que acecha hoy en día al gigante asiático es la «corrupción generalizada». «Los que creían en el comunismo y hoy ya no creen en nada están preparados para recibir el Evangelio», resaltó.

Primero pidió vocaciones de hombres jóvenes y en total fueron 172 los chicos que se levantaron para ofrecerse voluntarios. Posteriormente se repitió la llamada para «mujeres y chicas jóvenes». En total fueron cerca de 300 niños y adolescentes los que se mostraron dispuestos a «hacer discípulos». «Todos estamos llamados a evangelizar y en Asia miles de millones de personas aún no conocen a Jesucristo», aseguró Argüello.

Todos ellos fueron bendecidos por los obispos presentes en el encuentro sobre un escenario montado en el centro del estadio entre aplausos del público. Después, iban regresando a sus asientos, muchos de ellos con el rostro inundado de lágrimas.

Tras ellos llegó el turno para las familias. Subieron 200 al escenario. «Un éxito», según Kiko Argüello. «No somos un grupito muy beato de una parroquia, todos los que estamos aquí estamos llamados a evangelizar», les dijo previamente.

El acto, que se inició a las 17.30 horas y concluyó casi a las 21.00, estuvo marcado por el carácter festivo que le dieron los numerosos adolescentes que ocuparon el césped, justo delante de la grada de tribuna y frente al escenario desde el que el iniciador del Camino lanzó sus mensajes. Según dijo, la cantidad de familias numerosas que pertenecen al movimiento son «una bendición». «La familia cristiana salvará a Europa, la sociedad y la Iglesia», agregó.

En la primera mitad del acto se celebró una procesión con la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados, que fue portada a hombros por seminaristas de la diócesis hasta el escenario en el que quedó instalada durante el encuentro. «La Virgen ha inspirado el camino», dijo Argüello.

«Ser el rostro del Señor»

Por su parte, el arzobispo de Valencia, que ofició la celebración de la Palabra, invitó a las 20.000 personas reunidas en Mestalla a «ser el rostro del Señor» en la sociedad y a «salir a anunciar el Evangelio» siguiendo el ejemplo de Jesús. «Él nos entrega su poder, su amor y nos regala su misión», agregó. «Yo estoy con vosotros», les dijo a los miles de jóvenes presentes, a quienes también pidió que vayan a «hacer discípulos».

En el encuentro, entre otras autoridades, estuvieron presentes el presidente de Les Corts, Juan Cotino, instalado en el palco presidencial de Mestalla durante todo el acto, y el rector de la Universidad Católica de Valencia (UCV), José Alfredo Peris. En la actualidad, el Camino Neocatecumenal cuenta con alrededor de un millón y medio de integrantes en más de 120 países de todo el mundo.