Un polvorín a punto de estallar

Las 60 hectáreas que se han quemado en zonas próximas a Manises, Ribarroja y Paterna han desatado la alarma entre los vecinos del parque natural del Turia. La devastadora acción del fuego y la proliferación de las cañas tras los incendios.

Esas cañas son las que propician un rápido avance de las llamas y para combatir su presencia hay que realizar tareas de arrancado de brotes cada dos o tres semanas

Vecinos de la zona tanto de la Canyada como de la Presa claman por la limpieza de la zona y al mismo tiempo rezan para que no se produzcan más siniestros que provocaron daños y momentos de gran tensión en su día. La tensión es tal que en algunas zonas, se han organizado vecinos y voluntarios para realizar batidas de vigilancia.