Rafa Muñoz
Viernes, 19 de junio 2015, 16:52
Durante todo el viernes La Rambleta acoge la segunda edición de València Vibrant, una reunión de catorce horas en la que más de treinta conferenciantes hablarán sobre el cambio que ha sufrido Valencia y su gente.
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¿Pero qué es una persona vibrante? Según este lobby ciudadano, se trata de aquel profesional con una actividad arraigada al territorio, implicado a nivel afectivo o laboral a la ciudad, que participa activamente en distintas iniciativas de la sociedad civil y cree que las personas tienen capacidad de influencia pera mejorar la ciudad que habitan.
«El objetivo de esta edición, que en cierto modo coincide con el de la primera, es reunir a muchos de esos profesionales valencianos o que tienen que ver con Valencia que realmente están haciendo de Valencia una ciudad vibrante, y creo que sólo escuchándoles podemos aprender mucho y ver cómo ellos han conseguido desarrollarse profesionalmente», explicó Quique Medina, uno de los organizadores.
«En la anterior edición a lo mejor lanzamos muchas más preguntas y algunas se quedaron sin responder; este año, además de la encuesta, donde ya hay respuestas, sí que pretendemos que haya más respuestas, que no nos quedemos sólo en pregunta sino que intentemos responder a situaciones como urbanismo, espacio, quién debe liderar esta ciudad, si vale la pena irse o quedarse, etcétera», señaló Medina.
Aprovechando esta nueva edición de València Vibrant, la organización del certamen ha presentado su primer informe anual, llamado: Estudio cuantitativo 2015. Trabajar, habitar y liderar en la València Vibrant. El objetivo del estudio era definir cómo son, qué valoran y qué expectativas tienen las personas vibrantes de la ciudad de Valencia.
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«Una de las principales características de esta población es que participan activamente en la sociedad civil, tienen una tasa de participación en asociaciones muy alto, tienen una visión distinta del trabajo, valorando por encima de todo la vocación, la autonomía, la creatividad y poder tener tiempo libre», explicó Guillermo Dorado, de Grup Sociograma, y uno de los responsables de la encuesta.
«Esta población, además, tiene expectativas distintas a la anterior, prefiere vivir de alquiler y tiene muchas inquietudes, ha estado fuera, y piensa que Valencia es una ciudad de oportunidades en la que le gustaría vivir y trabajar», concluyó Guillermo.
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