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Jose Forés Romero
Viernes, 11 de septiembre 2015, 20:41
Es una de las arterias principales del centro de Valencia. Una de esas vías en las que hace tiempo que está prohibido circular a más de 30km/h. Se trata de la calle San Vicente Mártir. Eje por el que miles de vehículos transitan entre semana. Ahora uno de sus tramos más cruciales o representativos, el que discurre entre las calles Periodista Azzati y la Sangre, se encuentra en obras. La reurbanización de este referente comercial se dirige a ensanchar, a casi el doble, el tamaño de las aceras.
Esta situación ha obligado a desplegar un importante efectivo de agentes de la Policía Local de Valencia para la regulación del tráfico con cuya actuación se ha evitado que se produjeran atascos llamativos o más importantes que los que se generan habitualmente. El sonido de sus silbatos, eso sí, serán la banda sonora para al menos tres semanas, tiempo previsto del corte. Los conductores que circulen por la calle de la Sangre sí que podrán dirigirse hacia Garrigues o la misma calle San Vicente, donde la reforma ha dejado un único carril habilitado por las vallas de obra. El corte afectará también a las líneas de la EMT, por lo que se estudia como itinerario alternativo habilitar un carril en la avenida Barón de Cárcer en contra de la dirección actual.
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