La antigua Harinera del Grao reanuda sus obras para convertirse en espacio municipal

Los concejales de Vivienda, Vicent Sarrià, de Empleo y Emprendimiento, Joan Calabuig, y de Innovación, Jordi Peris, han visitado hoy la antigua Harinera del Grao en la que ayer se reiniciaron las obras para su consolidación y rehabilitación como espacio sociocultural y empresarial.

Según ha informado el Ayuntamiento de Valencia en un comunicado, el edificio se convertirá en un vivero de empresas, un espacio sociocultural y un centro municipal de referencia en políticas de empleo y apoyo a los jóvenes emprendedores.

La finalización de las labores de consolidación y rehabilitación del edificio, que se realizan con cargo al denominado Plan de Confianza, están previstas entre los meses de julio y septiembre, y tienen un presupuesto de 2.726.975 euros.

Una vez concluida dicha fase, para la que existe una partida de 841.103 euros en el presupuesto municipal de 2016, la financiación de estas obras de habilitación tendrá carácter plurianual, con una nueva consignación presupuestaria en 2017 para concluirlas.

El edificio, de cinco plantas, va a integrar algunos elementos de la construcción original, como la antigua tolva de madera donde se cargaba la harina.

El concejal de Vivienda, Vicent Sarrià, ha recordado que las obras de la Harinera se paralizaron hace algunos meses porque en su transcurso "se produjeron circunstancias no previstas y sobrevenidas" al tratarse "de una intervención compleja y difícil" debido al estado "de ruina del conjunto a rehabilitar".

Tanto Sarrià como Calabuig y Peris han visitado las distintas partes de la antigua Harinera, desde donde han contemplado el estado en que se encuentra el que fuera circuito de Fórmula 1 al que recae la parte trasera de la Harinera.

Sarrià ha afirmado que este asunto es una "de las herencias más envenenadas del anterior gobierno municipal y del anterior gobierno de la Generalitat", y ha revelado que el circuito fue ejecutado "como una obra de urbanización adelantada de lo que tenía que ser la prolongación de la Avenida de Francia".

Además, ha añadido que el convenio que en su día firmó el Ayuntamiento con la Generalitat no alude "ni una sola vez" a ningún circuito de Fórmula 1, pero sin embargo "obliga al Ayuntamiento a repercutir como cargas de urbanización alrededor de 40 millones de euros".

En opinión de Sarrià, "es obvio que el programa fue mal planteado desde el principio" ya que un gobierno "que no hacía por gestión directa ningún tipo de actuación" la encargó ésta "a la empresa municipal Aumsa sin dotarla de los fondos necesarios".

"Por eso entendemos que era un encargo envenenado", ha proseguido Sarrià, quien ha mantenido que desde la delegación de Urbanismo "el objetivo es revertir esa situación y empezar una licitación nueva de todo el programa".

Así, ha afirmado que podrá presentarse "quien quiera" aunque todavía existen incógnitas "que pesan mucho desde el punto de vista económico".