Hacienda ya busca otro edificio ante el deterioro del de Guillem de Castro

El Ministerio de Hacienda busca edificio en el centro de la ciudad para instalar su sede en Valencia, según confirmaron ayer fuentes del departamento que dirige Cristóbal Montoro. Las dependencias de Hacienda se instalarán, provisionalmente, en el número 6 de la plaza Ciudad de Brujas, en un edificio donde hace unos años ya se ubicó la Inspección de la Agencia Tributaria.

Sin embargo, no es más que una solución temporal, según confirmaron las mismas fuentes. «Es bastante probable que no volvamos a Guillem», aseguraron. Por «Guillem» se referían al edificio de la calle Guillem de Castro, un inmueble propiedad de Hacienda desde su inauguración el 14 de febrero de 1959. Se trata de un edificio de estilo arquitectónico nacional propio de los años 40 y 50. Con una superficie útil de 8.000 metros cuadrados, está dotado de seis plantas con un sótano y áticos. Sus arquitectos fueron Luis Calvo y Echenique. Su estructura es de hormigón, al igual que los forjados de los pisos. Destaca su carpintería de aluminio y las vidrieras en el corredor de acceso a los despachos. A lo largo de los años ha sufrido procesos de modernización de las oficinas y también la huella de atentados terroristas en los años 80.

Sin embargo, todo ello podría tener las horas contadas. Hacienda espera, a finales de octubre, el informe técnico que determinará cómo se encuentra el inmueble. Lo más importante, sin embargo, no es el estado del edificio, que a principios de este mes hubo de cerrar sus puertas por un nuevo desprendimiento (cuyos restos cayeron sobre las redes de seguridad colocadas tras desperfectos anteriores), sino el futuro del mismo. Fuentes oficiales de Hacienda no se atrevieron a aventurar qué pasará con el edificio, si habrá que reformarlo, rehabilitarlo o quedará impracticable.

Todo parece indicar, según pudo saber este diario, que los distintos derrumbes que ha sufrido el edificio (dos solo en este año, en marzo y en julio) vienen provocados por el deterioro de las sujeciones del falso techo, lo que ha provocado la caída de grandes fragmentos de escayola en distintos puntos del edificio, incluido sobre mesas ocupadas, en horario laboral, por funcionarios del Ministerio de Hacienda. Aunque no ha habido que lamentar ningún accidente, Hacienda no quiere dejar nada al azar y un equipo de técnicos y arquitectos inspecciona en estas fechas el edificio.

De este estudio concienzudo saldrá la decisión final. Sin embargo, Hacienda ha empezado a moverse y ya rastrea el mercado inmobiliario del centro de la ciudad en busca de un inmueble de las características necesarias. Aunque fuentes del ministerio no supieron concretar qué condiciones requeriría la futura sede, otras fuentes consultadas por este diario apuntan que el inmueble de Ciudad de Brujas, por ejemplo, ya cuenta con la instalación eléctrica necesaria para atender a los funcionarios que trabajarán en la sede y a los ciudadanos que la visiten.

Cabe recordar, además, que la de Hacienda no es la única sede gubernamental que estará en una ubicación distinta a la suya. La de la Delegación de Gobierno, sin ir más lejos, es el Palacio del Temple. Sin embargo, los trabajos de rehabilitación del edificio se han alargado, ralentizados en parte por el enfrentamiento entre Ayuntamiento y Gobierno por la planta supletoria que Delegación pretendía construir en lo alto del palacio, levantado a finales del siglo XVIII.