

Secciones
Servicios
Destacamos
P. MORENO
Martes, 10 de enero 2017, 20:48
Más que un aparcamiento en el paseo marítimo parece un camping de caravanas en toda regla, tanto por el número de vehículos como por el tiempo que pasan en la Malvarrosa, a orillas del mar y sin pagar nada por la acampada. Los hosteleros protestaron el lunes de nuevo por esta situación, que aumenta en las vacaciones como ha ocurrido las pasadas Navidades.
El problema es que los turistas estacionan de manera espaciado, en cordón o ligeramente oblicuos para crear una zona de descanso en un lateral del vehículo. «El estacionamiento en esa zona no se hace así», comentó el lunes uno de los empresarios afectados, que ve cómo cada cierto tiempo los clientes de los establecimientos cercanos deben estacionar en otro lugar, con lo que se alejan las opciones de negocio.
Las mismas fuentes consideraron que es ilegal «cuando acampan. Acampar se considera cuando lo utilizan para dormir y aquí tienden ropa, sacan las sillas y las mesas». Otro de los problemas es que el tramo no está señalizado como aparcamiento en batería. «Si no colocan señales como que se tiene que aparcar en batería, entonces los de las caravanas les dicen a los policías que no tienen obligación», dijeron, por lo que los agentes «se tienen que ir sin poder hacer nada».
Fuentes municipales indicaron que las autocaravanas pueden estacionar, salvo que se pudiese acreditar que están acampando. En ese caso se procedería a denunciarlos ya que está prohibido acampar libremente en la ciudad. Compromís, grupo mayoritario del tripartito, planteó en el anterior mandato un camping municipal en el parque de Cabecera, en Campanar, aunque no hay nada decidido sobre esos solares próximos a un retén de la Policía Local, en el viejo cauce.
La alternativa, El Saler
De ahí que la única alternativa legal sean los campings de El Saler. Los campistas que acuden al paseo marítimo de la Malvarrosa utilizan los aseos de los restaurantes de la playa, conectan los desagües a los imbornales del alcantarillado y pasan los días de vacaciones sin que reciban ninguna presión por parte del Consistorio para que busquen otro lugar de acampada, según denuncian los empresarios de la zona.
El único camping municipal fue cerrado hace varios años. Enclavado en la playa de El Saler, el problema es que se había convertido en una urbanización con pavimento alrededor de las caravanas y las cabañas de madera, además de la plantación sin control de numerosas plantas alóctonas.
La solución fue desmantelarlo todo para regenerar los terrenos con dunas, zonas de paseo e itinerarios peatonales, un proceso que todavía no ha terminado y que necesita más financiación pública para devolver el esplendor al paraje. En cuanto al paseo marítimo de la Malvarrosa, los empresarios se resignan a que el gobierno municipal actúe de una vez contra la acampada ilegal que se produce cada vez que hay vacaciones, sin que existan los servicios adecuados para atender a los turistas, pese al compromiso electoral de situar un recinto en Campanar.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.