PACO MORENO
Lunes, 16 de enero 2017, 20:28
El Parque Central se abrirá al público cuando el tiempo lo permita. Parece una excusa, pero la realidad es que la climatología importa y mucho en la construcción del enorme jardín de 110.826 metros cuadrados, iniciado el 4 de mayo de 2015 y que debía estar listo para su apertura el próximo abril, al tener un plazo de ejecución de 22 meses, según la adjudicación.
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La demora ya es un hecho, a la vista de la marcha de las obras, que por fin tomaron un ritmo adecuado tras resolver la falta de permiso de ocupación de algunas parcelas, además de la descontaminación de una zona próxima a Ruzafa.
El nuevo elemento que entra en escena, confirmaron fuentes de la empresa pública, es la climatología. «Las fechas de plantación están supeditados al tiempo, a la climatología. Es importante para las plantas que se haga en el mejor momento según sus características para evitar que sufran en ese momento», precisaron fuentes de la entidad.
Por ese motivo, la puesta en servicio del parque está ligada a la «óptima plantación, a las necesidades de las plantas», subrayaron. En ningún caso se quiere precipitar una inauguración del parque diseñado por la paisajista norteamericana Kathryn Gustafson, que ha supuesto una inversión pública de 15,8 millones de euros.
Hay dos períodos o fases de plantación en función de las especies y la climatología: Entre mayo y junio se plantarán sobre todo palmáceas, mientras que entre octubre y noviembre, el resto. Las mismas fuentes indican que podría plantarse en septiembre pero no es probable ya que suele haber temperaturas altas. En todo caso, dependerá de que se vaya el calor veraniego y de que se registren precipitaciones.
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En total, se plantarán mil árboles y 85.000 arbustos y herbáceas. Los primero tendrán un calibre alto para garantizar su supervivencia. Eso se definirá por el perímetro del tronco más que por la altura. Habrá árboles desde 35 hasta 70 centímetros de tronco, mientras que algunas especies como la datilera llegarán a 7 u 8 metros. Los pinos ahora en viveros alcanzarán los cuatro metros.
los datos
Las obras comenzaron el 4 de mayo de 2015, y suponen la urbanización de 110.826 m2, un 40% de la superficie total.
Sólo de la zona de la alquería ahora en rehabilitación se retiraraon 165 tonaleadas de basura, escombros y otros residuos..
Un carril bici recorre el exterior del Parque y conectará con el barrio de Malilla por debajo del paso elevado de Giorgeta..
En el caso de las plantas, para su selección se ha tenido en cuenta la época de floración y la combinación de colores. Además de Valencia, los ejemplares se traen de Cataluña, Italia, Holanda, Japón, China e Indonesia, entre otros países. De estos últimos, sobre todo semillas y esquejes. Sobre la producción y aclimatación en viveros, se producen desde hace meses en poblaciones cercanas a Valencia para su aclimatación. De las plantas un 40% y de los árboles, alrededor de un 85% ya está en esa instalación.
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Hay plantas en producción, en crecimiento y otras casi listas para ser trasladadas al Parque Central. Según el tipo de especie y la rapidez de desarrollo se van escalonando las reproducciones, de manera que en la época de plantación definitiva presenten un aspecto saludable y cumpla con las especificaciones del proyecto en cuanto al tamaño.
Desde la sociedad pública insistieron en que se cuida mucho la preparación de los terrenos. Para ello se ha excavado un espesor diferente para cada especie y grupo. También hay prevista una tierra distinta y un porcentaje de material orgánico en función de las necesidades de cada especie. El riego incluye un tubo de aireación de las raíces. Así se dará oxígeno al terreno y se espera que las raíces desarrollen mejor.
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Por otro lado, estos días se levanta un muro que separará dos zonas del parque, y que estará parcialmente tapado con tierra y vegetación. Estos elementos actúan como estructuras de retención que dan forma a la topografía de la Huerta Jardín y al Jardín de los Niños.
La estructura se hace con paneles prefabricados de hormigón que en su cota más alta alcanza los seis metros de altura, con una textura que contiene huecos con tierra vegetal en los cuales se puedan plantar especies trepadoras que cubran el muro en toda su extensión. Se utilizarán muchas plantas pequeñas y colgantes. Entre otras, lampranthus, ciprés rastrero, jazmín, romero y otras aromáticas.
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