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Campanario de la iglesia de San Nicolás.

Joan Ribó aboga por un «consenso» que permita tocar las campanas con menor intensidad en Valencia

El alcalde recuerda los límites acústicos que marca la ley y subraya que a él le «encantan»

EUROPA PRESS

Miércoles, 1 de febrero 2017, 17:09

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha abogado este miércoles por buscar una solución "técnica" y de "consenso" que permita seguir escuchando las campanas de la ciudad pero bajando la intensidad de su sonido para cumplir con los niveles máximos que marca la ley.

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Así lo ha manifestado este miércoles tras visitar las obras del carril bici, acompañado del concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, al ser preguntado por el "descontento" en el gremio de campaneros, después de que el consistorio haya decidido suspender los toques regulares en los campanarios de la parroquia de San Nicolás y otras iglesias del centro de la ciudad (como el convento de San José de la Montaña), ante las denuncias vecinales por el ruido, y en aplicación de la Ordenanza Municipal contra la Contaminación Acústica aprobada en 2008.

"Nosotros no tenemos nada contra las campanas. A mí me encantan", ha asegurado el primer edil, pero "por desgracia, tenemos unas leyes, leyes que hizo el PP sobre contaminación acústica y cuando una emisión fija emite por encima de lo que permite la ley estamos obligados a cumplir la ley", ha puntualizado.

De este modo, ha instado al "diálogo" para encontrar una salida porque también "se ha de entender que hay vecinos que han protestado, que han presentado denuncia, que han ido al Síndic de Greuges y nosotros nos debemos a una serie de leyes". Eso sí, en el caso de Bienes de Interés Cultural (BIC), como es el campanario del Miguelete, hay una excepción, ha precisado.

Posibilidades técnicas

Para ello, ha apostado por soluciones técnicas en sus sistemas eléctricos que permitan mantener el tono de las campanas "manteniendo los niveles máximos de sonoridad". Así ha apuntado a la posibilidad de bajar la intensidad de las bovinas eléctricas, bajar el impulso y la masa del martillo que pica la campana o incluso amortiguar con algún tipo de funda el martillo. "Hay soluciones técnicas y los campaneros, lo hemos estado hablando, nos han dicho que es posible, por tanto, vamos a buscarla", ha animado.

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"Nosotros estamos dispuestos a trabajar en la búsqueda de una solución de consenso pero los que tocan las campanas deben entender que si hay una ley, se nos presenta una denuncia y el Síndic de Greuges nos conmina a actuar, tenemos que actuar", ha avisado.

"Todas las soluciones que podamos encontrar para que se cumpla la ley y se puedan tocar las campanas de forma normal, a nosotros nos parece perfecto", pues a su entender, "las campanas son un ente que ayuda mucho al funcionamiento de la ciudad".

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