Los hosteleros alertan de que prohibir aparcar en el carril bus pone en peligro 500 empleos

La Federación de Hostelería de Valencia ha asegurado esta mañana que la prohibición de aparcar por la noche en el carril bus afecta a 750 locales y pone en riesgo 500 empleos. Es uno de los apartados que ha destacado el presidente de la entidad, Manuel Espinar, en una comparecencia con representantes de cinco asociaciones donde han resumido todas las dificultades que tienen por parte del Ayuntamiento para la actividad turística en la ciudad.

Espinar ha recordado que la medida de no estacionar en el carril bus se ha tomado sin consenso y sin información previa a los afectados. Ha considerado que el acuerdo con los aparcamientos es un "parche" porque supone un coste añadido para los ciudadanos y no cubre la demanda los fines de semana.

Pero la comparecencia ha tocado diversos temas como el retraso en la concesión de permisos de terrazas, que el presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes, José Luis Gelabert ha cifrado en una demora de dos años de media. El representante también ha subrayado el bloqueo de nuevos permisos en algunas calles del Ensanche, sin que el Ayuntamiento dé ninguna razón objetiva, ha denunciado.

El presidente de la Asociación de Hospedaje, Vidente Tadeo, ha incidido sobre los apartamentos ilegales, donde ha asegurado que suponen una competencia desleal, no tienen la misma exigencia fiscal que el resto del sector y hasta provocan la despoblación de algunas zonas del centro y Ruzafa por el perjuicio que causan a los vecinos.

Germán Valenzuela, presidente de la Asociación de Pubs, ha pedido más medidas contra el botellón y contra los grandes eventos que degeneran en esta práctica. Ha recordado que hace dos años propusieron al Ayuntamiento mediadores en la puerta de sus locales para tratar de reducir los ruidos nocturnos en las calles, incluso pagándoles los empresarios. "Eso sigue en un cajón y sin respuesta ninguna".

Iñaki Vázquez, presidente de Restauración Organizada, ha asegurado, por su parte, que los intentos del Ayuntamiento en reducir los horarios comerciales afectan a 100 empresas de los centros comerciales. "El 20 % de las ventas los hacemos en domingo, y cerrar ese día supondría hasta un 7 % menos de puestos de trabajos", por lo que ha pedido a la administración que tenga en cuenta estos datos.

Por último, Espinar ha leído un decálogo de propuestas al Ayuntamiento. La limitación de la concesión de nuevas licencias para evitar más barrios saturados, agilizar los permisos de las terrazas, negociación de las tasas de mesas y sillas, limitación de eventos gastronómicos en espacios públicos, participación de los hosteleros en el bando de Fallas, medidas urgentes contra los apartamentos ilegales, lucha contra el botellón, un plan de ocio, paralización de la prohibición de estacionar en el carril bus y aumentar la limpieza y baldeo en toda la ciudad.