

Secciones
Servicios
Destacamos
F. RICÓS
Viernes, 6 de marzo 2020, 00:22
valencia. El número de actuaciones que realizó Casa Caridad fue el año pasado de 454.227, la cifra más alta de los últimos cinco años, y un 4,2 % más que en 2019, aseguró el presidente de la entidad, Luis Miralles, en la presentación del balance de acciones del año pasado.
«Se trata de unos datos que muestran que junto a personas con una situación cronificada de pobreza con las que llevamos tiempo trabajando, se suman nuevos usuarios que precisan de alguno de nuestros recursos, especialmente gente que llega de Latinoamérica en situación de protección internacional», destacó Luis Miralles.
El presidente de la entidad, acompañado por la gerente, Guadalupe Ferrer, destacó que Casa Caridad «es un termómetro de las personas desfavorecidas de la ciudad de Valencia. Los datos muestran una realidad: la cifra de atenciones es ligeramente superior al año anterior y las perspectivas de los primeros meses de 2020 apuntan a esta línea de crecimiento debido a los problemas internacionales y la incertidumbre económica. De hecho, el 90 % de las personas que acuden a nuestra asociación están en edad laboral, sin ningún tipo de ayuda o con rentas que solo les permiten cubrir una parte de sus necesidades».
Los responsables de la asociación destacaron que los albergues de Casa Caridad en las instalaciones de Pechina y Benicalap registraron un nivel de ocupación cercana al 100%. El año pasado se registraron 45.796 pernoctaciones, un 3,2% más que el ejercicio anterior. Y resaltaron que uno de cada cuatro usuarios del albergue para personas sin hogar de Pechina fueron valencianos, mientras que el porcentaje de extranjeros y del resto de españoles fue del 50%.
La gerente, Guadalupe Ferrer, incidió en que un 40 % de las usuarias de los albergues son mujeres, que llegan con sus hijos y parejas, y anunció que este año, posiblemente en mayo, «vamos a sumarle el nuevo proyecto Fénix Sanchis Bergón, un edificio con ocho viviendas supervisadas con capacidad para unas 40 personas con el objetivo de ofrecer un nuevo servicio para usuarios que estén en una última fase de adquirir su independencia y dotar a Valencia de un nuevo recurso para personas sin hogar».
«Esa igualdad entre hombres y mujeres desgraciadamente viene a través de la pobreza», declaró Miralles.
En materia de familia destacaron que el año pasado Casa Caridad efectuó alrededor de 7.500 actuaciones dentro de su Programa Escuela-Familia, y ayudó en la búsqueda de empleo, vivienda o formación a los padres y madres de los 165 niños de entre uno y tres años de las Escuelas Infantiles.
Según se desprende de los datos de Trabajo Social de 2019, el número de raciones de alimentos repartidos fue de 344.527, un 5,1% más que en 2018.
Luis Miralles desveló que cada día la asociación que preside atendió a cerca de 400 personas en el servicio de comedor, de los que un 75% son inmigrantes, una cifra ligeramente superior a la del año anterior. En este sentido, destacó el aumento de personas que llegan de países en zona de conflicto solicitando protección internacional. El año pasado descendieron los usuarios procedentes de países de Europa del Este, pero aumentaron un 60% la atención a hispanoamericanos, destacando el crecimiento de personas provinientes del Salvador, Nicaragua, Honduras, Colombia y Venezuela.
Además indicaron que cerca de un 50 % de los solicitantes de socorro a Casa Caridad tienen entre 41 a 65 años. «Se trata de un colectivo cuyo acceso al empleo se complica con el paso del tiempo y con el que Casa Caridad trabaja su reinserción social», aseguraron.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.