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Martes, 2 de noviembre 2021, 20:21

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Con un autobús a la hora, un centro de salud al otro lado de las vías, sin comercios ni servicios básicos, la pedanía se queja de nuevo por el repunte de delincuencia y la prostitución.

DAMIÁN TORRES
Con un autobús a la hora, un centro de salud al otro lado de las vías, sin comercios ni servicios básicos, la pedanía se queja de nuevo por el repunte de delincuencia y la prostitución.
Con un autobús a la hora, un centro de salud al otro lado de las vías, sin comercios ni servicios básicos, la pedanía se queja de nuevo por el repunte de delincuencia y la prostitución.

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