El PP alerta de la renuncia de obras al tardar las licencias

El concejal del grupo popular Alfonso Novo lamentó ayer que el tripartito del alcalde Joan Ribó «no sea capaz de desbloquear la concesión de licencias urbanísticas en el Ayuntamiento». A su juicio, el ritmo de las autorizaciones es «es preocupante como lo demuestra que el pasado año sólo se concedieran 45 licencias de construcción para un total de 1.049 viviendas nuevas».

Novo achacó la lentitud en la tramitación y concesión de licencias urbanísticas a la «indefinición y la falta de criterio del actual gobierno municipal», que según destacó «tiene tres años paralizada la actividad urbanística en la ciudad sin que, desafortunadamente, vislumbremos que se esté trabajando en una salida que la agilice».

La tramitación de licencias urbanísticas «es un auténtico calvario para los interesados», señaló el edil, con una espera de meses e incluso años, lo que provocó en 2017 que 12 peticionarios de licencia desistieran o renunciaran a la tramitación. En lo que llevamos de 2018 ya se han producido 2 renuncias. En su opinión, es una «pena para la ciudad que por la mala gestión del tripartito el Ayuntamiento no esté aprovechando la recuperación económica».

Dijo por último que la situación que «está perjudicando gravemente a muchas empresas, a la contratación de mano de obra y está generando un incremento de los precios de la vivienda ante la escasez de licencias que afecta directamente al comprador final y principalmente a las economías medias».