![Operarios trabajan en la instalación de una de las pérgolas.](https://s1.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/202109/29/media/cortadas/164519453--1248x752.jpg)
Ver fotos
Secciones
Servicios
Destacamos
Ver fotos
Á. SERRANO / M. GUADALAJARA
Miércoles, 29 de septiembre 2021, 00:58
Las pérgolas de la plaza Ciudad de Brujas dan más que hablar conforme crecen hacia las alturas y su afección definitiva al Mercado Central se va adivinando. La peatonalización de este enclave, un auténtico 'cul de sac' sin planificación previa nacido como fruto del ... fin de la avenida del Oeste, está sorprendiendo a propios y extraños. Arquitectos consultados por este diario, todos ellos con amplia experiencia en la ciudad, se muestran expectantes y coinciden en cuestionar la ubicación de estas estructuras, además de plantear otras soluciones. Algunos de ellos, con pies de plomo, esperan a que las obras estén terminadas; otros insisten en que había otras opciones para dar sombra a la plaza sin que con ello se ocasionara un impacto visual y estético sobre el mercado y la Iglesia de los Santos Juanes.
Uno de los grandes arquitectos valencianos lanza la crítica más dura con un sencillo símil: «Aquí nos están obligando a llevar el paraguas desplegado aunque no llueva, porque estar debajo es como si la gente estuviera obligada a llevar paraguas o sombrilla, y así no puedan ver los edificios», comenta Rafael Tamarit.
Tamarit fue jurado del concurso para la reforma y no se mostró partidario de ninguna de las opciones finalistas; denuncia que la infraestructura es ya una «catástrofe ciudadana, turística y arquitectónica». Argumenta que ahora que se puede ver aún más claramente la estructura de las pérgolas «no hay que tener mucha imaginación para comprobar que es un desastre visual».
El asombro llega para los reputados arquitectos al comprobar que la colocación de estas pérgolas no cuenta con la tutela de la administración autonómica, es decir de la Dirección General de Cultura y Patrimonio, que sólo realiza un control del seguimiento arqueológico de la actuación y de si esa intervención ha sido o no adecuada. Del resto, de si afecta o no al entorno patrimonial no deciden ni opinan. Al menos así lo han asegurado.
Y la sombra de las críticas no está sólo sobre las pérgolas como estructura sino sobre su ubicación. Es la valoración que le merece esta solución al arquitecto Luis Báguena, quien elaboró un proyecto de rehabilitación del Colegio del Patriarca. Considera que el problema está en la ubicación y cree que «el eje que se debería de haber dispuesto es el más cercano a la calle de la Cruz donde está la Universidad Católica de Valencia». Pero aún va más allá y cree que «todavía es más dañino el núcleo de ascensores, que es un pegote tremendo pegado al mercado, y si en origen se hubiera planteado conjuntamente la reforma de ambas cosas, se debería de haber alejado de la fachada para que así la fachada no tenga que soportar las marquesinas, las rampas de acceso al garaje.los ascensores de salida... entonces creo que el problema está en esa ubicación».
Cuestionan la elección de las estructuras y consideran haber valorado otras opciones como por ejemplo, más árboles.
Álvaro Gómez-Ferrer Bayo es arquitecto y miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos. Ha realizado el Plan Parcial de Reforma Interior de El Palmar, los Planes Parciales de Protección del entorno de Atarazanas y de San Miguel de los Reyes, así como el Plan Especial de Protección del Museo de Bellas Artes de Valencia. Recientemente ha ganado el concurso para la realización de la quinta fase del Museo de San Pío V. Voz, por tanto, más que autorizada.
Noticia Relacionada
«Que haya un aparcamiento subterráneo no quiere decir que tenga que terminar en una plaza dura, sin árboles. Con bajarlo dos metros se pueden plantar todos los árboles que se quieran», indica Gómez-Ferrer, que también critica la colocación encima de las pérgolas de placas solares. «Hay muchos otros sitios donde captarla. No tiene por qué estar puesto al lado de los Santos Juanes en un área en el perímetro de protección de la Lonja», asegura el arquitecto. «Si se quiere hacer una plaza se hace una plaza arbórea. No es problema hoy en día», dice Gómez-Ferrer, que admite «no conocer» del todo el proyecto.
Al habla José María Lozano, arquitecto y miembro del Consell Valencià de Cultura. Sus reservas tienen que ver con lo que ya planteó el jurado. «Me consta que hubo objeciones. Quedó reseñada la posición de Rafael Tamarit que es uno de nuestros maestros de arquitectura. Tiene marchamo de autoridad», indica Lozano. «Colegas míos con los que tengo cierta relación como Blanca Lleó o Ignacio Casar Pinazo ya plantearon objeciones desde el punto de vista de la escala y la altura de las pérgolas. Les preocupaba que pudieran entorpecer la visión monumental del entorno. Suscribo esas palabras», asegura y tilda las pérgolas de «inadecuadas» basándose en «las propias actas del jurado» y en el «respeto» que le merecen.
Teresa Carrau está especializada en conservación del patrimonio y en recuperación de espacios protegidos. Reconoce que ha estado investigando el tema. Ella se presentó al concurso, por lo que es cuidadosa con su valoración. «Por lo que he podido ver, intentan dar una continuidad a lo que en el pasado fue la avenida del Oeste. Tienen como función tapar las ventilaciones del sótano. También se plantean en diferentes alturas. Hay una intencionalidad de respetar lo que hay en el entorno», indica Carrau, que cree que hay que esperar para ver cómo queda el proyecto cuando termine.
Sin embargo, hay quien ataca más al fondo del asunto y ve en todo esto un problema de base, nunca mejor dicho. Javier Domínguez considera que «Peñin es una magnífica paisajística por eso sé que el problema de raíz está en las bases de un concurso convocado por la Generalitat y con las bases estás condicionando a las propuestas que se presentan; habría que plantearse por qué se presenta tan poca gente a los concursos en esta comunidad».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.