El arzobispo de Valencia en el funeral de las víctimas de la DANA: «El sufrimiento se superará juntos, que las diferencias no lleguen a convertirse en divisiones»

Laura Garcés

Valencia

Lunes, 9 de diciembre 2024, 20:41 | Actualizado 22:21h.

Comenta

Acercamiento a los que sufren, unidad y esperanza. Son los mensajes que el Arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, ha dejado en la misa funeral por las víctimas de la DANA concelebrada por sacerdotes de parroquias afectadas por la catástrofe. En su homilía ha lanzado el compromiso de la Iglesia a mantenerse junto a los afectados al afirmar que como «Iglesia hemos querido acompañar a todos, ayudar en la medida de nuestras posibilidades. Lo hemos querido hacer y lo seguiremos haciendo mientras sea necesario».

Con la llamada a la superación de la tragedia de la DANA ha dejado claro que conseguirlo pasa por la necesidad de actuar desde la unidad: «El sufrimiento se superará si juntos somos capaces de ponernos en pie, de mirar al futuro con esperanza, de unir nuestras fuerzas en favor de los más golpeados por la tragedia». El deseo de la unidad necesaria ha cobrado mayor claridad cuando el Arzobispo ha elevado la plegaria para que las «dificultades no nos lleven a caer en la insolidaridad, que las diferencias no lleguen a convertirse en divisiones».

La homilía, una oración por las víctimas, se ha detenido en quienes perdieron la vida, las personas desaparecidas y en todos cuantos han perdido parte de su vida sea al haber visto destruidas sus casas o arrasado su trabajo.

Fraternidad, sufrimiento compartido han sido otros valores en los que ha hecho hincapié en la primera parte de la homilía, que ha dado paso a palabras para infundir esperanza mencionando a las personas que han puesto «alegría» y manifestado su solidaridad mostrando «lo mejor de la condición humana», a quienes arriesgaron a salvar la vida de otros para insistir en que «una solidaridad Cristiana y auténticamente humana es una solidaridad desinteresada».

Las palabras de monseñor Benavent, planteadas como manifestación de cercanía con los afectados por las inundaciones, ha terminado con palabras dichas en lengua valenciana y dedicadas a la Virgen de los Desamparados, patrona de todos los valencianos. «Que tots arríbeu a experimentar el seu consol i la seua protecció maternal».