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Avalancha. Así califican la situación que se está produciendo en Valencia con la venta de extintores y otros servicios de prevención de incendios tras la ... tragedia del edificio de Campanar. «Las llamadas son continuas. Estamos desbordados», afirma Luis María Carreras, gerente de la empresa valenciana Minimax que está abierta desde principios del siglo pasado. «Llevamos más de cien años trabajando», afirma.
En el mismo sentido se pronuncian desde Extintores Vivó que indican que las llamadas para pedir presupuestos e información se han disparado desde el viernes por el incendio que arrasó el edificio del barrio de Campanar. En este sentido, destacan que muchas de las peticiones proceden de administradores de fincas. Explican que se interesan tanto por extintores de polvo convencionales como los de CO2.
También Luis María Carreras señala que «es impresionante las peticiones que llegan por correo electrónico, llamadas o incluso whatsapp. Se ha desatado una psicosis tras la tragedia de Valencia».
Según estas empresas, el sector está desbordado por el aluvión de llamadas. «Especialmente son presidentes de comunidades de finca los que llaman», añade Carreras que puntualiza que muchos «lo quieren para ya». «En el 75% de los casos requieren que se les instale de forma inmediata. Un 25% lo que piden primero es un presupuesto», apunta.
Pero Carreras lamenta que tras una tragedia de este tipo de disparen las ventas. «No tendría que ser así. La gente debería apostar por la prevención y estar más concienciados de los riesgos que existen», recalca el gerente de Minimax.
Ha añadido que muchas comunidades de vecinos no disponen de estos servicios «y ahora se interesan por instalarlos con un extintor por planta, en el cuarto de ascensores o donde estén los aparatos eléctricos. También buscas sistemas de prevención como detectores de humo». Algunas de las comunidades de vecinos son anteriores a la normativa que obligaba a disponer de estos instrumentos, pero ahora, tras el incendio de Campanar, se han preocupado por adaptarse a la normativa.
También ha avanzado que en su opinión la normativa va a cambiar tras el triste suceso de Valencia. «Disponer de estos servicios es una garantía de seguridad y la gente debería saberlo. Hay que tener en cuenta que técnicamente se avanza cada día más», ha precisado Luis María Carreras que ha añadido que esta semana se celebra en Ifema, en Madrid, la feria Sicur que es la del sector y que se celebra cada dos años. «Lo de Valencia va a ser un detonante», ha aclarado.
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