El Consistorio paga una multa de 40.000 euros por el accidente de Viveros

El portavoz del grupo municipal popular, Eusebio Monzó, desveló ayer en el pleno que la modificación de créditos que llevaba el gobierno municipal para su aprobación incluía el pago de 40.000 euros por la sanción impuesta por Inspección de Trabajo debido a una infracción muy grave como responsable del montaje y desmontaje de las gradas portátiles de los conciertos en el jardín de Viveros en julio de 2017, que se saldó con la muerte de un trabajador por una caída al vacío.

Esta causa está abierta en el juzgado, por lo que Monzó reiteró la petición de que el Consistorio se persone en esta causa, al igual que hizo esta formación el pasado febrero y fue desestimado. «Queremos que se depuren responsabilidades, el alcalde dijo que el Ayuntamiento era ajeno a esta cuestión y derivó la responsabilidad a la empresa del montaje, mientras que ahora ha llegado esta sanción».

Por esta razón, el edil popular solicitó de nuevo que «se depure todo lo que sea necesario, aunque afecte a algún miembro del propio gobierno», en clara referencia al delegado de Cultura Festiva, Pere Fuset, que no está investigado en dicha causa. La modificación de créditos fue votada en contra por el grupo popular.

El informe señala que el 1 de junio de 2017, una asociación informal de siete empresas contratadas, solicitó al Ayuntamiento la ocupación temporal de la explanada de los Jardines de Viveros para el montaje y explotación de tres barras de bar para la venta de bebidas, así como de cinco 'food truks' para la venta de comida, y la utilización durante los conciertos del quiosco bar ya existente. La solicitud fue atendida favorablemente por el Ayuntamiento. El día 20 del mismo mes, las empresas solicitaron una autorización para instalar dos gradas homologadas con certificación de instalación de 504 localidades de capacidad cada una, así como césped artificial en toda la explanada de los Jardines de Viveros. El 2 de julio, tres de las siete firmas presentaron un escrito conjunto en el que sólo ellas se hacían responsables del montaje y desmontaje de las gradas y del césped, así como de los accidentes que pudieran derivarse de su uso, siempre y cuando no se produjeran «por el correcto uso de las mismas».

El 21 de junio, el Ayuntamiento acordó contratar con una empresa el servicio de instalación, montaje y desmontaje de infraestructuras. Con posterioridad, le hicieron llegar la petición de las gradas y el césped de las promotoras. «En el acta se llega a la conclusión de la existencia de una infracción muy grave en materia de prevención de riesgos laborales, cuya presunta comisión es atribuible al Ayuntamiento de Valencia», se indica en el informe, por lo que la decisión fue imponer una sanción grave por un total de 40.000 euros.