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L. S.
Valencia
Jueves, 14 de julio 2022, 17:10
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Valencia aprobará este viernes la adjudicación del nuevo contrato del servicio municipal de ayuda a domicilio por un importe de más de 45 millones de euros para los próximos cuatro años, un contrato «histórico y sin precedentes en la ciudad de Valencia, que pasa de los 25 millones a los 45 y de las 1.808 personas beneficiarias que hay actualmente a 4.320«, según la concejala de Servicios Sociales, Isabel Lozano.
Además, «se aumentan las horas de prestación, de 5 a 10 semanales, también los fines de semana y festivos, y se incorporan nuevos servicios, como por ejemplo el de podología, peluquería, fisioterapia o atención psicológica», ha dicho la regidora Lozano.
La edil ha detallado las mejoras que presenta el nuevo contrato del servicio de ayuda a domicilio, conocido como SAD. Afirma que hay un «incremento de presupuesto, aumento del número de horas de atención, incremento del número de beneficiarios, la incorporación del SAD específico para personas en situación de dependencia, nuevas figuras profesionales, nuevos servicios y ampliación de horario».
Además, la concejala ha dicho que «con el nuevo contrato nos quedaremos sin personas en espera y prevemos cubrir la demanda de los próximos cuatro años, que siempre va además porque la población va envejeciendo».
Así mismo, suben las horas de prestación del servicio: de 5 a 10 semanales por usuario hasta un máximo de 56 mensuales. El horario de este servicio en estos momentos era de 7 a 20 horas de lunes a viernes. Ahora se ampliará entre las 7 y las 22 horas de lunes a sábado y, en aquellas situaciones que lo requieran, también los domingos y festivos.
Por otro lado, se añaden nuevos servicios, como por ejemplo el de podología, peluquería, fisioterapia rehabilitadora, enfermería, terapia ocupacional, integración social, actividades socioculturales, cesión de claves, y limpieza de choque y desinfecciones.
Lozano ha destacado la inclusión de la atención psicológica a domicilio, puesto que, «como ha demostrado la pandemia, las personas mayores son las que más sufren el aislamiento y la soledad», así como el llamado banco de movimiento, a través del cual «la empresa adjudicataria tendrá que tener a disposición de las personas usuarias grúas, elevadores, caminadores, sillas de ruedas y otra equipación para facilitar la movilidad».
También habrá más figuras profesionales. El equipo actual estaba formado por 232 personas, de las cuales más del 90% son auxiliares de ayuda a domicilio y el resto trabajadores sociales. Con el nuez contrato el personal llegará a los 368 empleados y empleadas, e incorporará por primera vuelta profesionales de psicología, enfermería, integración social y terapia ocupacional.
Otros servicios nuevos serán: una oficina de la entidad adjudicataria en la ciudad de Valencia, un teléfono gratuito de atención a las personas beneficiarias, un sistema de control de presencia de los auxiliares a domicilio y dispositivos móviles para los profesionales.
Cabe destacar que el Ayuntamiento de Valencia asume el 83,2% del coste del SAD; la Generalitat, el 15%, y el 1,8% se financia mediante precio público. «Sólo paga un 11,30% de las personas beneficiarias que tienen la posibilidad económica», ha resaltado Isabel Lozano.
«El servicio de ayuda a domicilio, junto a la teleasistencia y la comida a casa conforman los servicios a domicilio», ha manifestado la regidora Isabel Lozano, quien ha remarcado «la importancia de todos ellos, pero especialmente del SAD, porque las personas mayores, en situación de dependencia y las personas vulnerables tengan una vida digna, estén cubiertas todas sus necesidades básicas, de alimentación, de salud, pero también emocionales, de relación con su entorno».
Este servicio comprende el conjunto de curas y actuaciones realizadas principalmente en el domicilio y en el entorno social de la persona con el fin de atender las necesidades de la vida diaria y de apoyar personal de carácter polivalente y preventivo, seguimiento y acompañamiento para las personas y, si procede, para la unidad de convivencia, que presentan dificultades físicas, intelectuales, cognitivas, de salud mental o sociales, o se encuentran en situación de vulnerabilidad.
El objetivo es mantener, en la medida de lo posible, a la persona usuaria en su entorno natural en las mejores condiciones de vida, a través de la atención personal, la ayuda en el hogar y la atención socioeducativa.
Según ha explicado Lozano, «para evitar los monopolios de las empresas», el nuevo contrato del SAD se ha dividido en tres lotes y un cuarto especializado en personas en situación de dependencia. El 69% de la puntuación que obtengan las empresas candidatas corresponde a criterios sociales. Las empresas que han resultado adjudicatarias de los diferentes lotes han sido UTE POVINET SCV- MACROSAD, SCA y CLECE.
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