El Ayuntamiento de Valencia, obligado a retrasar el equipamiento del polideportivo de Nou Moles

Parece increíble, pero es cierto. El Ayuntamiento de Valencia aprobará este viernes la suspensión temporal del contrato de suministro de equipamiento deportivo que era preciso para 'vestir' el complejo de Nou Moles ubicado entre las calles Burgos, Luis Lamarca y Castillo de Benisanó.

La decisión es cosa de fuerza mayor, ya que la Conselleria de Educación y Deportes todavía no ha terminado las obras del polideportivo, por tanto, no ha entregado el edificio al Ayuntamiento de Valencia y, entonces, la administración local no puede realizar las tareas de equipamiento de las instalaciones.

La cuestión de fondo es que las obras de este polideportivo comenzaron en marzo de 2011, se han producido varias paralizaciones y modificaciones, y después de 12 años, los vecinos de Nou Moles siguen sin poder disfrutar de estas instalaciones públicas.

En la Junta de Gobierno se aprobará «suspender temporalmente la ejecución de los lotes del contrato de suministro e instalación del equipamiento deportivo del complejo deportivo Nou Moles que será efectiva desde el mismo día que se firme el acta de suspensión».

En este mismo documento se añade que la paralización «se mantendrá mientras que no sea recibido el edificio por el Ayuntamiento de Valencia y pueda garantizarse su ejecución en las adecuadas condiciones de acceso y seguridad».

En el informe que justifica la suspensión, se detalla que en principio, la última planificación que la Generalitat habría ofrecido al Consistorio, era que las obras acabaran en el último trimestre de 2022.

A continuación se añade en el informe que «una vez más, se han producido demoras en la ejecución y su finalización no se ha producido ni en el último trimestre de 2022 ni en el primero de 2023», algo que afean desde el Ayuntamiento e incluso al parecer, el concejal de Deportes, Javier Mateo, envió una carta a la conselleria para exigir su cumplimiento, pero no ha surgido efecto de momento.

Es por eso, que la Junta de Gobierno aprobará este viernes suspender el suministro de los lotes de equipamiento porque recuerdan que «el contrato de suministro e instalación del equipamiento deportivo se formalizó en enero de 2023, y ya empezaba a computar el plazo de ejecución de cuatro meses» y la finalización del contrato se produciría el 9 de mayo de 2023.

Ahora el contrato se mantendrá a la espera de que la Generalitat entregue el edificio polideportivo al Ayuntamiento valenciano.

Cabe recordar que entre las tareas que tendrá que realizar el Consistorio cuando lo recepcione, figurará pintar el recinto, instalar el suelo y las canstas y vestir los recintos. Los primeros lotes de estas tareas que ahora se suspenden ya salieron por 400.000 euros y faltaba volver a licitar un lote, el número dos, que quedó desierto.

Estas instalaciones del polideportivo de Nou Moles, que se levantaron sobre el antiguo pabellón Marcol, cuentan con una inversión de 12 millones de euros e incluye dos piscinas, una para waterpoolo y otra para cubierta para practica educativa de natación.

También habrá una cancha principal con aforo con capacidad para 1.610 espectadores, 1.368 en graderíos fijos y otros 224 en gradas retráctiles para practicar fútbol-sala, voleibol, hockey sala, baloncesto y balonmano.

Es importante destacar que ya en el mes de enero, desde la Federación de Vecinos de Valencia reclamaron la puesta en marcha de este polideportivo. Entonces, la presidenta vecinal, María José Broseta, comentó que en «junio, ya nos dijeron que quedaba poco para acabar. Que sólo quedaban unas mamparas y perfilar acabados, pero la realidad, es que han pasado los meses y nos dicen que la instalación aún no está lista para entregar».

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