Noche infernal, casi de forma literal, la que han vivido los vecinos de Benimaclet, en concreto de la calle Enric Navarro. Han ardido seis contenedores en unos 50 metros, lo que ha provocado importantes daños en varios edificios, locales y hasta coches aparcados. Hasta el lugar se han trasladado efectivos del Parque Norte de Bomberos, que han apagado los seis contenedores, que han ardido entre las 2 y las 6 horas.
Los bomberos han recibido la primera llamada a las 2 de la madrugada. Al llegar a la calle, se encontraron con un panorama infernal: cuatro contenedores de llamas, el toldo de una tienda y todo el cable trenzado de la fachada del número 19 de la calle ardían convertidos en una tea gigante. Una vez extinguido el fuego, los bomberos comprobaron que el interior de la finca se había llenado de humo al explotar por el calor los cristales de la escalera. Los vecinos, que esperaban en las terrazas, pudieron volver a sus casas cuando los bomberos ventilaron el edificio.
Aparte de los contenedores afectados, también se calcinaron los toldos y carteles de los comercios que están junto al patio: una tienda de buñuelos, un kebab, un bar, una asociación, una papelería y una tienda de zapatos, desde la que este martes explicaban que han abierto para poder limpiar. Además, había hasta cuatro coches afectados. El servicio terminó sobre las 3 horas. Más tarde, hubo que volver para intervenir en el incendio de otros dos contenedores.
El portavoz de la Asociación de Vecinos de Benimaclet, Paco Guardeño, ha explicado que este tipo de sucesos no son comunes, pero que la noche «se ha vivido con mucha preocupación». «Hay casi 50 metros de calle afectados, no han sido solo dos contenedores», comenta. En Benimaclet, aunque no tienen problemas con el botellón en el barrio desde hace años, sí lamentan las molestias derivadas de las fiestas que se montan en la Escombrera, donde acuden los que ellos llaman, de forma casi cariñosa, 'los zombies de la Escombrera'. Las molestias se dan, explican, a primera hora de la mañana, cuando los jóvenes vuelven de fiesta y recorren las calles del barrio.
Tal como ha contado este diario, son varios los bares de la zona que han decidido no abrir los sábados o domingos a primera hora para no 'tentar' a estos jóvenes. «A veces vienen con ganas de seguir la fiesta y los bares optan por no meterse en problemas», cuenta Guardeño. La presión policial constante terminó con el botellón en la plaza de Benimaclet, pero con la Escombrera, situada junto al cementerio del barrio, no se ha hecho nada, quizá, entienden algunos residentes, por encontrarse relativamente lejos de zonas habitadas y al otro lado de la Ronda Norte. Sin embargo, los residentes de esa zona del barrio insisten en que el ruido provoca no pocas molestias, así como las peleas y las discusiones que se dan en varias ocasiones.
Lo que sí admite la asociación de vecinos es que, si bien el botellón no es un grave problema, la inseguridad y, sobre todo, el incivismo, sí lo es. «De jueves a domingo por la noche, hay mucho ruido: gente que sale a cantar a la calle, gritos, carreras... dormir es muy complicado», admite Guardeño. «No son sólo los estudiantes. Muchas veces vienen gamberros de otras zonas de la ciudad», aventura el dirigente vecinal. No se descarta que eso sea lo que ha ocurrido esta noche en Enric Navarro, aunque la Policía Nacional se ha hecho cargo de las investigaciones, según algunos de los comerciantes afectados por el incendio. «Va a venir la Científica, nos han dicho», han explicado desde una zapatería.
Críticas de la oposición
Por su parte, la concejala socialista María Pérez ha lamentado que la falta de «dirección política» en la Policía Local se está traduciendo ya «en un problema organizativo que pasa factura a los barrios de Valencia como ha ocurrido esta noche en Benimaclet, donde, fruto del vandalismo, han ardido varios contenedores y algunos vehículos estacionados». La edil ha advertido desde el inicio de la legislatura de la «falta de liderazgo en materia de seguridad ciudadana», donde el gobierno del PP «está absolutamente atascado, sin proyecto, sin propuestas y sin avanzar en la negociación con los sindicatos para desbloquear una nueva unidad que atienda los problemas de los barrios».
«Desde que el Partido Popular de María José Catalá tomó las riendas del Ayuntamiento, hay un vacío de liderazgo en la Policía Local que se está traduciendo en un problema organizativo serio para los agentes y, por lo tanto, un fuerte inconveniente para la resolución de problemas que se registran en nuestros barrios», ha continuado la concejala socialista. Pérez ha exigido a Catalá y al PP «que dejen de buscar excusas y que se pongan a trabajar ya de verdad en la seguridad ciudadana y en la Policía Local porque esta ciudad necesita una Policía Local con una dirección política eficiente que les ayude a combatir los problemas que siguen surgiendo».
La edil ha denunciado como «ejemplo evidente» de la «inacción» del gobierno de Catalá en seguridad ciudadana «su incapacidad de sentarse con los sindicatos periódicamente para resolver la creación de la nueva unidad de convivencia». «Es imprescindible que se sienten, que avancen y que resuelvan los problemas de organización para que los no se enquisten los incidentes en los barrios y se convierta en un problema de delincuencia grave», ha finalizado.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.