

Secciones
Servicios
Destacamos
Lola SOriano
Valencia
Miércoles, 23 de junio 2021, 21:32
Los vecinos de la plaza de Honduras, plaza Alfonso Gabino y Blasco Ibáñez llevan años aguantando el ruido derivado del ocio nocturno, pero tras el levantamiento de muchas restricciones y después de haber vivido un tiempo sin ruido durante el confinamiento, aseguran que los problemas de ruido y concentración masiva de gente vociferando cerca de sus casa han vuelto.
Por eso, este miércoles han realizado un primer acto de protesta con una cacerolada que ha tenido lugar a las 20 horas. Además, han colgado pancartas en sus balcones donde se pueden leer lemas como 'Stop ruido'; 'Derecho al descanso' o 'Help UE'.
Como explica el portavoz de la nueva asociación de vecinos de la Plaza de Honduras, Toni Pau, "en el barrio hay una sobresaturación de terrazas de bares. Ya hemos dicho al Ayuntamiento que nuestro principal problema no es sólo el botellón, sino que cada vez tenemos más terrazas de bares y eso conlleva mayor concentración de gente y ruidos y gritos hasta altas horas de la madrugada".
Incluso detalla que han vuelto a proliferar la apertura de nuevos locales. "Hay puntos como un antiguo banco, un local que antes era un laboratorio clínico o un almacén de un supermercado que se están convirtiendo en pubs o en locales donde se vende alcohol a muy bajo precio y a granel. Eso sólo puede fomentar el ocio de borrachera y exigimos al Ayuntamiento de Valencia que tome cartas en el asunto".
Los vecinos aseguran que con los nuevos locales donde se vende alcohol barato "se fomenta la borrachera hasta la madrugada y es imposible el descanso vecinal . Están favoreciendo el alcoholismo de la juventud y el Ayuntamiento está permitiendo el uso de la mayor parte de la vía pública para este fin".
Afirman que la cantidad de locales y terrazas que tienen "es tan alta, que tenemos más concentración que en Benidorm". Añaden que "la calle Serpis se está convirtiendo en una terraza prolongada, Es como un polígono para la borrachera. La gente cuando están cerrando los locales, se quedan en la misma zona con los vasos de plástico que les dan bebiendo y armando ruido y luego llegan los manteros y les suministran más bebida".
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El rincón de Euskadi que te hará sentir en los Alpes suizos
El Diario Vasco
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.