Las cámaras de vigilancia en los monumentos se retrasan de nuevo hasta finales de junio

El Ayuntamiento tiene previsto aprobar hoy en la junta de gobierno una nueva prórroga a la empresa encargada de la colocación de cámaras de vigilancia en el entorno de siete museos y monumentos. El sistema debía estar listo en marzo, se aprobó una demora hasta abril y el nuevo plazo es el 25 de junio.

La iniciativa cuajó en una reunión el 12 de enero de 2018 entre el Ayuntamiento y la Generalitat, tras un nuevo acto de vandalismo contra la Lonja. Fue la gota que colmó el vaso y decidieron apostar por esta fórmula, con grabaciones que pudieran demostrar las agresiones.

Ahora, el servicio de Patrimonio Histórico lleva a la junta la nueva prórroga, que se justifica por parte de la empresa con diferentes argumentos. Está el caso de la «adaptación de las características iniciales del proyecto, redactado en 2018, a las necesidades técnicas actuales, mediante diferentes reuniones con los entes implicados».

También habla la empresa de que la «petición del cliente se va a instalar la última versión del firmware en las cámaras del proyecto (versión abril 2021)», mientras que el 31 de marzo les comunicaron la «aprobación del permiso solicitado a la Consellería de Educación para comenzar los trabajos de obra civil en las zonas con protección arqueológica. Los trabajos de obra civil se iniciaron el jueves 8 de abril».

Por otra parte, ha comenzado el proyecto de urbanización para la regeneración del entorno de la plaza Ciudad de Brujas, la Lonja, Mercado Central y Santos Juanes. «Dicho proyecto afecta directamente a la instalación de las cámaras de la Lonja, por lo que los tiempos se tienen que compatibilizar con la ejecución de la obra civil», indican.

Por esto se solicita una demora de ocho semanas sobre el plazo aprobado hasta ahora, con lo que el nuevo plazo de entrega es el 25 de junio. «Se considera que los aspectos expuestos anteriormente se corresponden con causas no imputables al contratista de las obras y que motivan la ampliación de plazo solicitada», se indica en el documento.

En total, 43 cámaras vigilarán el entorno inmediato de la Lonja (ocho), Almudín (ocho), torres de Serranos (seis), torres de Quart (seis), Museo de la Ciudad (cinco) y Palacio de Cervellón (cuatro). El presupuesto de licitación fue de 508.000 euros.

Hasta octubre de 2018 no se presentó el proyecto a la comisión de videovigilancia, que dio el visto bueno poco después, al igual que ocurrió con la Conselleria de Cultura. Los dispositivos no pueden grabar el interior de viviendas y las imágenes deben quedar a salvo con un protocolo de confidencialidad hasta que sean borradas de manera automática.

La instalación ya está completada, al menos la canalización del cableado, en el Palacio de Cervellón y las Atarazanas, aunque la demora en el entorno de la Lonja se presume decisiva. La empresa adjudicataria trabaja ahora en la parte de la plaza Ciudad de Brujas, mientras que enfrente del edificio declarado Patrimonio de la Humanidad se sigue con la renovación de las tuberías de agua potable.

Un sistema parecido de videovigilancia se emplea en algunos tramos del jardín del Turia, mientras que la asociación de Comerciantes del Centro Histórico ha pedido la colocación de las mismas en las calles más transitadas por los turistas. Esto último ha sido desestimado por el Ayuntamiento, pese a que en otras ciudades sí funciona.