La Catedral de Valencia recupera sus tesoros

El proceso de restauración ha sido llevado a cabo por el Institut Valencià de Conservació, Restauració i Investigació (IVCR+i), una entidad de derecho público que nació con el fin de proteger y difundir los bienes muebles integrantes del patrimonio cultural valenciano. La directora de la institución Gemma Contreras, explicó el desarrollo de la renovación y subrayó que este trabajo, además de ser un trabajo de recuperación, ayuda a los historiadores a conocer el pasado del pueblo valenciano. «El instituto estará siempre dispuesto a colaborar con la catedral y con cualquiera que respete la herencia valenciana», expresó.

Cuando comenzó a ser tratada, la pintura 'La Predela de Los Lázaros' mostraba indicios de carbonización ya que, según se cree, fue víctima de un incendio en el pasado. «El estado de conservación a nivel estético era lamentable y crítico», explicó Inmaculada Julià, encargada de la restauración de la pintura. Tras diferentes estudios el IVCR+i consiguió conocer los materiales utilizados y, mediante un trabajo minucioso, logró reproducir los colores y estratos del dorado originales permitiendo observar las tres escenas que conforman la obra.

El IVCR+i llevó a cabo una investigación para conocer la autoría de la obra, que finalmente fue asociada al pintor Nicolau Falcó, activo en Valencia durante el primer tercio del siglo XVI, debido a las similitudes que presentaba la pieza con otras obras del artista. Aunque, según expresó la directora del IVCR+i, no se puede confirmar rotundamente que fue él quien pintó 'La Predela de Los Lázaros' ya que no existen documentos que lo demuestren.

Asimismo, el trabajo del instituto ha conseguido que los libros de Fábrica de la Seo del siglo XV puedan ser leídos tras un proceso lento y minucioso. «Se trataba de un papel hecho a mano, muy sensible y fácil de dañar. Tuvimos que ser muy meticulosos y tener mucho cuidado», explicó la directora del IVCR+i. Estas obras recogen los procesos de construcción de la Catedral de Valencia y, según expresó José Verdeguer, canónico responsable del Patrimonio Histórico Artístico de la Catedral, «de la torre del Micalet, uno de los signos más importantes e identitarios de la ciudad». Además, Verdeguer subrayó la importancia de estos textos ya que podrán ser utilizados como soportes de investigación. «A través de ellos, los historiadores serán capaces de conocer aspectos esenciales de la sociedad valenciana».

Tras un trabajo exhaustivo y minucioso, las piezas han sido expuestas en el Museo de la Catedral. «Actualmente estamos trabajando dos tablas completamente calcinadas que nos ha cedido la Catedral de Valencia. Esperamos que consigamos sacarlas adelante», expresó la directora del IVCR+i.