Covite pide a Ribó placas donde murieron cinco víctimas del terrorismo en Valencia

Ya han pasado cuatro años desde que la ETA se disolviera definitivamente. Sin embargo todavía existe un poso traumático de un sector de la población civil que requiere de memoria histórica para superar el dolor.

La presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) Consuelo Ordóñez ha dirigido una carta al Ayuntamiento de Valencia para manifestar su deseo de conmemorar a las cinco víctimas de terrorismo asesinadas en la capital del Turia. Para hacer honor a su memoria, el escrito insta al alcalde Joan Ribó a formar parte del proyecto 'Una víctima, una placa', que consiste en colocar insignias en recuerdo a las personas asesinadas por grupos terroristas en los lugares donde sufrieron los atentados.

Con esta campaña, el colectivo persigue «garantizar el derecho a la memoria del que en demasiadas ocasiones las víctimas del terrorismo han sido privadas», afianza Consuelo Ordóñez. Por desgracia han sido las propias víctimas las obligadas a «salvaguardar la memoria de los asesinados», prosigue Ordóñez.

El colectivo se caracteriza por defender los derechos de las víctimas del terrorismo, el Estado de derecho, la libertad, la pluralidad ideológica y la lucha por la deslegitimación del terrorismo.

Para la asociación es un acto de «justicia y responsabilidad» recordar a los fallecidos con una placa conmemorativa en los lugares donde se han perpetrado crímenes terroristas, y considera importante que se incluya el nombre de cada una de las víctimas, la fecha en la que fueron asesinadas y el grupo terrorista que cometió el atentado.

Aunque el Consistorio todavía no se ha pronunciado al respecto, el colectivo ya ha conseguido que algunos ayuntamientos como el de San Sebastián, el de Vitoria o el de Pamplona se hayan sumado a la campaña en favor de la memoria de los fallecidos por el terrorismo.

Asimismo, al proyecto también se han sumado otras ciudades no pertenecientes al País Vasco como el Ayuntamiento de Madrid y el de Zaragoza.

Junto a la Generalitat Valenciana, COVITE ha llevado a cabo durante años una labor de investigación y memoria reflejada en el 'Mapa del Terror', un proyecto que consiste en ubicar en el mapa los puntos exactos donde murieron en atentados terroristas en los últimos 50 años. Con el mapa digital que proporciona en la red la asociación presidida por Ordóñez, se busca que las comunidades autónomas tengan más fácil llevar a cabo su propuesta de memoria histórica.

A excepción del catedrático y político, Manuel Broseta, que cuenta con un monolito en el lugar donde fue asesinado por dos integrantes de ETA mientras se dirigía a dar clase a la facultad, son cinco las víctimas del terrorismo en la ciudad de Valencia que no cuentan con una placa conmemorativa.

Entre ellas se encuentran los nombres de Juan Antonio Pérez Herrero, Josefina Corresa Huerta, Antonio Castelló Vital, José Edmundo Casañ Pérez Serrano y Emilio García Martínez. Mientras espera la respuesta del alcalde de Valencia, COVITE insiste en que las instituciones deben preservar la memoria histórica y honrar a las víctimas fallecidas.