La Justicia avala la licencia para convertir el cine Metropol en un hotel

Además, también se ha podido conocer que «previamente se tiene que validar el recurso de la fundación contra el derribo». En ese contencioso la parte recurrente «solicitó la suspensión ejecutoriedad del derribo», como una medida cautelar. Esta circunstancia conduce a que mientras no haya respuesta a esta acción judicial todo queda como estaba.

Las apreciaciones de las fuentes llaman la atención en el hecho de que si el recurso contra el derribo consigue su objetivo, que el juez de la razón a la Fundación Goerlich, la licencia para convertir el espacio en hotel quedaría sin valor en tanto que la construcción no se podría derribar.

Todo ello conduce a que concluyan que el estado de las cosas en este momento deje el mismo escenario que existía antes de la sentencia de este miércoles 4 de marzo. No obstante, también se ha podido confirmar que la Fundación Goerlich no recurrirá este último fallo. Todo está a expensas del contencioso administrativo contra el derribo.

La situación actual retrotrae a mayo de 2023. Fue entonces cuando se presentó el recurso contra la licencia de derribo que había concedido el Ayuntamiento de Valencia. La interposición de este contencioso. Fue entonces cuando se solicitó «la suspensión de ejecutoriedad». La aspiración de la fundación era evitar que se hiciera efectiva la demolición a la que autorizaba la licencia.

El cine Metropol, obra de estilo racionalista del arquitecto Javier Goerlch, ha sido objeto de reiteradas campañas por su supervivencia bajo el lema 'Salvem el Metropol'. El objetivo perseguido era la conservación de la construcción de Hernán Cortés 9 como testimonio de la arquitectura decó en la ciudad. El edificio, no sólo conserva valor arquitectónico, además, atesora la memoria emocional de unas cuantas generaciones de valencianos, condición ésta que sin duda le transmite alma.

Uno de los elementos por cuyo mantenimiento siempre se ha luchado ha sido el embl de manera que también sobreviva el emblemático rótulo del que fue cine y que supone un ejemplo muy significativo de la tipografía que lleva impresa la personalidad creativa del arquitecto Javier Goerlich. Es la misma que utilizó para poner nombre a los espacios que fueron Refugio de los valencianos durante los bombardeos de la Guerra Civil.