Compromís defiende la tasa turística en Valencia y afirma que aportará cinco millones de euros al año

Desde en gobierno municipal del Ayuntamiento de Valencia, concretamente desde el grupo Compromís, el vicealcalde de Valencia y edil Sergi Campillo, opina que «desde el Ayuntamiento estamos muy satisfechos por el anuncio que se ha realizado por los tres grupos del gobierno con mayoría en Les Corts Valencianes de que se apruebe en el parlamento autonómico próximamente una proposición de ley para la implementación de la tasa turística en la Comunitat Valenciana y, por tanto, en la ciudad de Valencia».

Es más, ha señalado que «para nuestra ciudad es muy importante que se apruebe esta tasa turística y que sea municipal, porque nos permitirá obtener recursos para mejorar también los servicios que ofrecemos a los visitantes».

Campillo ha añadido que además servirá para «corregir las externalidades negativas que produce el turismo, que además, se concentra en algunos barrios de nuestra ciudad», una valoración que recuerda las críticas de los vecinos de Ciutat Vella.

Según el vicealcalde de Valencia, «necesitamos esta tasa turística para igualarnos a la inmensa mayoría de ciudades de Europa donde hace ya muchos años que existe esta tasa turística» y ha recalcado que «no ha tenido ningún efecto pernicioso sobre los visitantes a de la ciudad».

El vicealcalde ha recordado que «en nuestro país hay dos comunidades autónomas que llevan años con esta tasa y no han tenido ningún efecto sobre el número de visitantes que llegan a sus territorios, sino que además, gracias a esta tasa turística, se puede mejorar el nivel de servicios o hacer inversiones».

Llegado este punto, ha argumentado que se podrían invertir en cuestiones medioambientales, «como por ejemplo el parque natural de la Albufera».

Dicho esto, ha explicado que hay que recordar que «en un año normal, en prepandemia, Valencia tuvo más de cinco millones de pernoctaciones en nuestra ciudad y, por lo tanto, si se acaba aprobando esta formulación, con una media de un euro al día, que podría ser un poco mayor, tendríamos más de cinco millones de euros para poder realizar inversiones relacionadas con el sector turístico, pero también para mejorar el medioambiente, como he dicho por ejemplo en la Albufera».

Incluso ha lanzado otras propuestas, ya que ha dicho que también serviría para promocionar «nuestra cultura, festivales, música de calle hacia los turistas».

Por eso ha concluido que «bienvenida sea esta tasa turística, es un buen acuerdo que queremos saludar».

A la hora de valorar los términos aprobados, Campillo ha añadido que «posiblemente todos los grupos hubieran ido más lejos, pero evidentemente la política es el arte del pacto y, por lo tanto, se ha llegado a este acuerdo que nos posibilita a que por fin dentro de poco podamos tener esa tasa turística tan deseada en nuestra ciudad».

Ha asegurado que «nos permitirá invertir en la ciudad para prepararla para los visitantes, pero sobre todo para los vecinos de la ciudad».

En cuanto a la moratoria para que no llegue antes de 2023, Campillo opina que «esta moratoria que se ha hecho para que se implante a finales de 2023 como muy pronto, nos parece un tiempo más que suficiente para la recuperación del número de visitantes a nuestra ciudad». De hecho, ha señalado que esa recuperación está llegando «porque vemos un aumento muy importante de visitantes a nuestra ciudad y a finales de 2023 estamos convencidos de que se habrá llegado a la plena normalidad».

Por su parte, desde el PSPV aseguran que el acuerdo que firmaron con Compromís «establece que no se aplicará hasta que no se alcanzaran los mismos números previos a la crisis».Y han destacado que «aunque se apruebe la norma autonómica, aquí siempre estaremos a expensas de los números para no perjudicar la recuperación del sector». Recuerdan que votaron a favor de aplicar la tasa, pero en ningún caso si no hay primero una recuperación económica. Hablan de «no aplicarla nunca hasta que la recuperación sea completa», según fuentes oficiales.

Argumentan que primero habría que hacer un análisis económico para no crear un problema extra al sector hotelero.

Es decir desde el PSPV siempre han defendido debatir el asunto cuando se llegara a una situación prepandémica, pero esto podría hacer que se alargara hasta la próxima legislatura. En más de una ocasión la vicealcaldesa socialista Sandra Gómez ha hablado de esperar a la recuperación. «Dejemos que vuelvan a sentirse fuertes económicamente para establecer este debate», dijo en noviembre de 2021. Por tanto, decía que no era el momento idóneo para hablar de la tasa.

No hay que olvidar que en el pleno municipal del 18 de diciembre de 202 se aprobó una moción alternativa a la inicial de Compromís. Entonces el texto recogía la idea de «solicitar a Les Corts abordar la implantación de la tasa turística en la ciudad en el momento en el que la recuperación de la actividad turística de la ciudad sea una realidad y una vez alcanzados, al menos, los resultados del 2019 en términos anuales. Y una vez trabajada la misma con diferentes agentes implicados». Y cabe recordar que aquel año Valencia registró un récord de pernoctaciones con 5,27 millones de estancias y 2,18 millones de viajeros.

La cuestión de fondo es que no se especifica el horizonte temporal ni tampoco las condiciones en las que se tendría que dar esta obligatoria recuperación que se dijo como condición indispensable para introducir el cobro.

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