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Á. S.
VALENCIA.
Sábado, 16 de julio 2022, 00:12
Nuevo episodio en el conflicto entre la concejalía de Ciclo Integral del Agua y el Puerto de Valencia. El departamento que dirige Elisa Valía llevará a la Fiscalía a la Autoridad Portuaria por los supuestos vertidos en la red pública que provocan un olor muy característico, como a huevos podridos, en el entorno del cuartel de Cantarranas y que se dejan notar, sobre todo, en Nazaret.
Pese a que ya el pasado mes de mayo el Ciclo Integral del Agua prohibió al Puerto el acceso a la red pública de saneamiento de aguas, tal como ha publicado Radio Valencia y ha podido confirmar este diario, esos vertidos han seguido existiendo, lo que ha llevado a Valía a pedir al Ministerio Público que investigue si todavía se dan. Ya en mayo, el Puerto explicó que los cambios que son necesarios para atajar estos malos olores no son algo sencillo de hacer, porque pueden incluir incluso el cambio de una tubería entera, por lo que tampoco es rápido.
Hasta el momento, el Puerto lo ha intentado todo. O casi todo. Incluso la oxigenación de la tubería. Según fuentes conocedoras, el ácido sulfhídrico se genera por fermentación anaérobica de los residuos. Ante la falta de oxígeno, el gas aparece. Aunque tiene un olor muy característico, es también peligroso porque en concentraciones elevadas «te duerme el olfato y no te das cuenta», según ha indicado un técnico en riesgos laborales especializado en depuradoras, que ha añadido que está obligado a instalar «controladores de atmósfera en espacios cerrados» porque el gas, en concentraciones elevadas, puede ser perjudicial para la salud. Es algo que es «casi imposible» que se llegue a dar al aire libre y en un espacio abierto.
Para evitar todo esto, se requiere una obra compleja. La concejala Valía ha dicho este viernes que aunque la interlocución es constante, «el problema se repite». «No podemos demorarlo más porque los vecinos nos alertan del olor y creemos que hay que comunicarlo por si hay alguna responsabilidad», ha dicho la edil en declaraciones a la Ser. Este diario ha intentado ponerse en contacto con ella en varias ocasiones a lo largo del viernes pero, tristemente, no ha sido posible.
El Ayuntamiento culminó en abril expediente sancionador contra el Puerto por vertidos a la red de alcantarillado donde se superan los niveles máximos permitidos de ácido sulfhídrico. Las mediciones se realizaron por parte de un laboratorio independiente y se adjuntaron al proceso.
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