Pablo Alcaraz
Valencia
Jueves, 27 de junio 2024, 15:01
El culebrón del yate encallado en la playa de Pinedo a principios de este mes de junio empieza a cerrarse. La Dirección General de ... Costas ha exigido el pago de 75.000 euros a la aseguradora de la embarcación que quedó varada durante cinco días en concepto de fianza «por si no respondía de sus responsabilidades en cuanto a la restauración de los posibles daños ocasionados». En cambio, el departamento dependiente del Ministerio de Transición Ecológica ha descartado que se produjeran desperfectos medioambientales durante el encallamiento y las labores de reflote del 'Nordic Lilly'.
Publicidad
Desde el ministerio desconocen el importe de los trabajos de rescate ya que corresponde al seguro de la embarcación hacerse cargo del importe de estas labores. Por otro lado, Costas se ha basado en la falta de especies de especial interés sobre el terreno afectado por la presencia del casco del navío sobre el terreno afectado por la presencia del casco del navío, como fanerógamas marinas (posidonia) u otro tipo de flora y fauna marina a las que se deba prestar especial atención a la hora de su protección. Por tanto, y según los técnicos medioambientales, la biocenosis de la zona de encalle únicamente estaba formada por «arenas finas bien calibradas».
Noticia relacionada
Los trabajos de reflote del yate comenzaron el pasado día 6 de junio con la utilización de medios marítimos, en forma de dos naves remolcadoras, y medios terrestres, con el uso de dos excavadoras sobre una plataforma equipada con una bomba de dragado. El método escogido por el equipo de rescate consistió en excavar un canal bajo la quilla del barco que, a su vez, supuso una alteración del fondo marino a modo de hoyo de 150 metros cúbicos con unas dimensiones de 1,5 metros de profundidad por diez de diámetro. Este desperfecto se causó dado que las operaciones se extendieron durante varias jornadas hasta culminar con el desencallamiento exitoso el domingo 9.
El resultado obtenido a partir de la batimetría realizada con posterioridad a las operaciones de reflote avaló en su día que, como medida de precaución y ante el riesgo de ahogamiento para los bañistas que podía suponer la existencia de este agujero, se decidió cerrar un perímetro de un centenar de metros de playa con un vallado preventivo hasta su completa restauración, hecho que se produjo el pasado sábado 22.
Publicidad
A día de hoy, y tras una inspección visual de la zona por parte de los técnicos, se detecta que ya no existe esta alteración del fondo marino, aunque, según informan fuentes ministeriales, queda pendiente la realización de una segunda batimetría que verifique los resultados obtenidos en la primera valoración cualitativa. El segundo examen técnico se llevará a cabo «cuando las condiciones de oleaje marítimo lo permitan» a pesar de que todo apunta a la próxima semana como fecha en la que se de por solucionado en su totalidad este incidente.
Asimismo, Costas alega que no se produjeron contratiempos reseñables durante las operaciones de reflote como pudieran ser vertidos de contaminantes sobre el medio marino o la rotura de la estructura del yate. Aunque cabe recordar que el reflote se consiguió con éxito al tercer intento tras quebrarse las líneas de flotación en las dos tentativas anteriores.
Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Santander, capital de tejedoras
El Diario Montañés
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.