Denuncian que un bar de Valencia negó la entrada a una persona en silla de ruedas alegando que el local «estaba lleno»

El Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad Valenciana (CERMI CV) ha denunciado que un bar de la ciudad de Valencia negó la entrada a una persona con discapacidad usuaria de silla eléctrica --que iba acompañado de su asistente personal y de su familia--, lo que ha calificado como «discriminación absolutamente intolerable».

La entidad explica, a través de un comunicado, que el pasado 19 de julio un bar restaurante de la capital no permitió el acceso para comer a un usuario de silla eléctrica que iba acompañado de su asistente y de su familia.

«Cuando entramos al local para comer, el dueño del local nos negó la entrada, alegando que no podía entrar con silla de ruedas; ante esto yo y mi familia solicitamos una explicación y avisamos de que íbamos a llamar a la Policía, recibiendo por parte del propietario del local una indiferencia total«, señala la persona que ha asegurado ser víctima de los hechos.

«En pocos minutos --continúa-- viene una pareja de Policía Nacional, entran a hablar con el dueño y alega ante ellos que el local está lleno y que por eso no podían pasar; pero este es un local amplio que se encontraba casi vacío donde podrían entrar varias sillas de ruedas, es más, tienen baño adaptado como les obliga la ley«.

Según estas fuentes, los agentes se quedan «estupefactos« porque solo había dos personas en el local. »Ante esto, el dueño del local cambió el alegato, diciendo que con la mascarilla/respirador que llevo, puede tener problemas por si ocurre algo y tiene que llamar a un médico; siendo esto totalmente falso, ya que no necesito ninguna preparación especial para la comida, ni es algo que le repercuta al dueño del bar«, relata el afectado.

Esta persona ha presentado una denuncia en la oficina de consumo, señala CERMI, que apunta que «esto es un caso flagrante de disfobia por parte del dueño de este negocio«. En estos momentos, están a la espera de que la Generalitat se ponga en contacto con ellos.

El presidente de CERMI CV, Luis Vañó, ha señalado que lamenta que «estos hechos tan sumamente graves sigan sucediendo en pleno siglo XXI y que »cada discriminación a una persona con discapacidad es un ataque a todo el colectivo« y que se debe perseguir estos comportamientos de forma contundente, si cabe todavía mas, disponiendo también de mas recursos para prevenirlos.

Vañó ha recordado que el Código Penal castiga como delito este tipo de hechos. «Y no tenemos que olvidar nunca que la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad, ratificada por España, proclama el derecho inamovible de las personas con discapacidad a acceder a las actividades de ocio en las mismas condiciones que cualquier otro ciudadano», añade.

Así, ha hecho hincapié en que dicho tratado es de obligado cumplimiento no solo por las instituciones públicas, sino también por los operadores privados, como pueden ser establecimientos de ocio.

El CERMI CV prestará asesoramiento y orientación jurídica a la persona afectada, con el fin de interponer denuncia ante fiscalía.