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Una actualización de la página web iniciada el domingo y que se complicó más de la cuenta impidió este lunes a la EMT hasta poco más allá después de la dos de la tarde a tener paralizada la venta de abonos en todas sus modalidades. La pantalla mostraba que se encontraba en tareas de mantenimiento. Esta situación frenó la venta de miles de viajes, donde los usuarios debían acudir al resto de canales de venta.
Fuentes de la empresa indicaron a primera hora de la mañana que la actualización de la web era cuestión de una hora, aunque el bloqueo se prolongó mucho más. Se trataba de una actualización de la base de datos para mejorar la velocidad de los procesos y servicios, para lo que fue necesario migrar y revisar el histórico de datos y tablas, en un proceso informático largo y complejo.
Los bonos tienen un viaje de cortesía, que permite hacer un viaje de más y en la siguiente recarga lo resta. La otra alternativa era acudir a los quioscos, estancos y las oficinas de atención al cliente que tiene la compañía, donde sí se podía hacer la venta con normalidad. Así lo confirmaron fuentes de la Asociación de Vendedores de Prensa de Valencia y Provincia.
La actualización de la web afectó en ocasiones al resto de servicios, como es el caso de la información del tiempo de paso de los autobuses, un instrumento indispensable para muchos usuarios. Pero lo más que afectaba eran las ventas, un recurso utilizado por la mayor parte de los viajeros de abono.
La EMT había contabilizado a 30 de septiembre un total de 70,76 millones de viajeros, de los que 2,2 millones habían sido con la modalidad de EMT Joven, cerca de 26 millones emplearon el Bonobús Plus y 1,8 millones el Bono Transbordo, como algunos de los principales. Esto da idea de los quebraderos de cabeza para muchos viajeros ayer.
La compañía municipal sumó el pasado ejercicio 95,49 millones de viajeros, con la consolidación de modalidades gratuitas como Amb tú y EMT infantil, que en conjunto ascendieron a 7,9 millones de viajes. De cara al próximo año, el Ayuntamiento ha aumentado su aportación para superar los 65 millones de euros, con lo que se podrá congelar las tarifas actuales.
La empresa se ha embarcado en la remodelación de 169 paradas, con el propósito de hacerlas accesibles para invidentes. Desde el pasado octubre se llevan a cabo estas obras, votadas por los vecinos en los presupuestos participativos de 2016. Incorporan, de acuerdo con una Orden del Ministerio de Vivienda, baldosas abotonadas y acanaladas para la mejora de la accesibilidad de las personas con discapacidad visual. Para realizar estos trabajos, cada parada se suprimirá entre dos y tres días, pero se informará previamente a los usuarios, en la misma marquesina o poste, de la parada de autobús en funcionamiento más próxima de la misma línea.
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