El entorno de San Miguel de los Reyes se adecentará hasta con pinturas murales

valencia. Carteles mugrientos pegados uno sobre otro, edificios ruinosos, matorrales y hasta vertederos alrededor del monasterio de San Miguel de los Reyes, la sede de la Biblioteca Valenciana. Ese paisaje indigno de la joya de la arquitectura renacentista en Valencia es con lo que pretende acabar la Dirección General de Cultura y Patrimonio, que anunció ayer un plan para adecuar estéticamente toda la zona.

El Monasterio de San Miguel de los Reyes está declarado bien de interés cultural (BIC), con categoría de monumento por la Generalitat. También acoge la sede de la Acadèmia Valenciana de la Llengua.

Fuentes de la conselleria señalaron que han convocado a los propietarios colindantes del edificio para presentarles el proyecto, que consiste en «mejorar las condiciones de adecuación estéticas y de seguridad del entorno del monasterio». Tanto su elaboración como la ejecución será asumido íntegramente por la Generalitat sin que suponga ningún tipo de coste para los propietarios.

La intervención prevé adecuar las fachadas de los edificios que bordean al monasterio, recayentes a la avenida Constitución y la avenida Hermanos Machado. Incluye un trabajo de pintura mural en colaboración con el Consorcio de Museos y que contará con artistas valencianos. A preguntas de LAS PROVINCIAS, fuentes de Cultura precisaron que la reunión que se mantenga con los propietarios será decisiva para perfilar el proyecto, puesto que en estos momentos se barajan dos líneas de actuación. Tras el encuentro se podrá concretar la extensión que se quieren realizar, así como el presupuesto y el estilo artístico de los murales, entre otros detalles.

También se mejorará la iluminación exterior del entorno y el pavimento de la calle destinada al aparcamiento. El proyecto no constituye ninguna modificación urbanística, por lo que su trámite ante el Ayuntamiento será breve. Cultura está trabajando en otro proyecto para restaurar el muro que circunda el monasterio y que forma parte de los elementos del Bien de Interés Cultural.

Como publicó LAS PROVINCIAS, uno de los últimos actos de vandalismo ha sido la aparición de pintadas en los muros que rodean los campos de huerta cercanos al monasterio. Esta construcción está incluida en el monumento, pese a que en algunos tramos se ha desplomado por la falta de mantenimiento. El proyecto de Cultura podría incluir su total recuperación.

El Ayuntamiento ha tramitado varios planes urbanísticos para el entorno de San Miguel de los Reyes, algunos vinculados a la fallida revisión del Plan General, que se modificó varias veces. En los últimos años se ha hablado de peatonalizar ese tramo de la avenida Constitución, para derivar el tráfico por otra calzada más al oeste. También de la construcción de un túnel o el derribo de un edificio de viviendas justo enfrente del monasterio.

Nada de eso se ha concretado y el resultado ha sido la degradación paulatina de casas y naves, sobre todo las más próximas a la ronda norte. Esta infraestructura no cuidó para nada del entorno de la Biblioteca Valenciana, pese a que podía haberse incluido el ramal que llega hasta Tavernes Blanques para su reurbanización integral. Sea como sea, el propósito de Cultura es adecentar la zona sin obligar a realizar planes urbanísticos, en un proyecto todavía por determinar al detalle.