Las fallas de Ciutat Vella piden aparcar en el carril bus por las restricciones al tráfico

Los colectivos de la Seu-Xerea-El Mercat; El Pilar-Sant Francesc y el Carmen consideran que una de las alternativas reales a las restricciones de tráfico que ha impuesto el concejal de Movilidad Giuseppe Grezzi, con la instalación de cámaras y las correspondientes multas a partir del 1 de diciembre, es la reactivación de los carriles bus como zonas de aparcamiento por las noches.

Como explica Tono Fagoaga, presidente de la agrupación La Seu-Xerea-El Mercat, «lo primero que nos gustaría es que se haga un aplazamiento de la puesta en marcha de las cámaras, mientras duran todas las obras de plazas que tenemos en el centro». Y eso es lo que pedirá hoy en el pleno el Grupo Municipal Popular.

A la espera de ver si el gobierno de Joan Ribó escucha esta petición unánime, Esteban Polo, de la agrupación del Carmen, afirma que «en 2018 hablamos con Grezzi. Nos dijo que nos tendría en cuenta y ya no supimos más. No nos recibe y queremos plantearle alternativas porque venimos de una situación de pandemia que ha afectado a todas las comisiones y si encima los falleros no pueden acudir al casal, veremos cómo quedan los censos».

Polo explica que «hay que recuperar el carril bus como aparcamiento, desde las Torres de Quart hasta las de Serranos y en puntos como Blanquerías, Guillem de Castro o la Paz, es decir el cinturón del centro». Y es que como añade Javier Tebar, presidente de la agrupación El Pilar-Sant Francesc, recuperar el carril bus por las noches no sólo beneficiaría a las fallas, sería también bueno para la hostelería».

Tebar indica que «para los casales es vital porque somos colectivos pequeños y si ponen tantas pegas, no vamos a levantar cabeza y no queremos volver a la imagen de los años 80, con todo el centro histórico cerrado y con yonquis por la calle».

Otras alternativas que ven viables o incluso complementarias sería «que nos dejen aparcar en el puente de les Arts. Si quieres buscar alternativas, las hay, otra cosa es que no quieran, y entonces peligran los censos y las fallas somos Patrimonio Inmaterial de la Humanidad», añade Javier Tebar, quien teme que las cámaras proliferen en las áreas más próximas a sus demarcaciones.

Si la semana que viene no les reciben o no hay cambios, anuncian que reunirán a los presidentes de las agrupaciones para analizar la situación y estudiar medidas «porque el 85% de los falleros de Ciutat Vella no viven allí, sino en otros barrios o en L'Eliana, La Pobla de Vallbona, Quart de Poblet o Puçol, entre otros».