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Los cojines berlineses en el puente de las Glorias Valencianas. Irene Marsilla
Tráfico en Valencia | Grezzi instala cuatro badenes berlineses en el puente de Glorias Valencianas para reducir la velocidad

El último invento de Grezzi

Conductores y ciclistas critican los badenes previos al carril bici de Gran Vía

lOLA sORIANO

Valencia

Martes, 29 de diciembre 2020, 14:18

Los conductores que acceden a la ciudad por el puente de las Glorias Valencianas, junto al Nuevo Centro, se han encontrado con la instalación de unos cojines berlineses en el carril de la derecha que conecta con la Gran Vía-Fernando el Católico. Se trata de una nueva medida para reducir la velocidad que la concejalía de Movilidad Sostenible, que dirige Giuseppe Grezzi, ha implantado dentro de las obras del carril bici de la Gran Vía que tantas críticas ha recibido de taxistas, conductores de la EMT e incluso de colectivos ciclistas.

Ahora son cuatro los badenes que se han instalado en este punto del casco urbano para tratar de resolver los escollos que está encontrando la concejalía para dar unidad al polémico carril bici que no va segregado. Además, se ha incluido una señalización en el suelo que recuerda que está prohibido circular a más de 30 kilómetros a la hora.

Irene Marsilla
Imagen principal - Tráfico en Valencia | Grezzi instala cuatro badenes berlineses en el puente de Glorias Valencianas para reducir la velocidad
Imagen secundaria 1 - Tráfico en Valencia | Grezzi instala cuatro badenes berlineses en el puente de Glorias Valencianas para reducir la velocidad
Imagen secundaria 2 - Tráfico en Valencia | Grezzi instala cuatro badenes berlineses en el puente de Glorias Valencianas para reducir la velocidad

En Movilidad Sostenible afirman que es una medida«para subrayar la obligación de reducir la velocidad y la necesidad de proteger a las personas que circulan por allí. Se trata de alertar de que deben de bajar la velocidad y reforzar la seguridad».

La realidad es que los conductores y ciclistas ya han lanzado las primeras críticas y aseguran que no tiene sentido que «se hayan quitado los cojines berlineses que la conselleria puso en la CV-500, porque eran un peligro, y ahora nos los pongan dentro de la ciudad», según opina María José Alonso, de la Plataforma Motera para la Seguridad Vial.

Alonso asegura que «es un nuevo parche que se han sacado de la manga de forma improvisada durante las obras del carril bici de la Gran Vía». Y añade que «si ya hay unas señales que marcan que no se puede circular a más de 30 kilómetros, con eso debería de ser suficiente». Afirma que «estos cojines berlineses son un peligro para los vehículos a dos ruedas. En primer lugar, porque mucha gente los esquivará. Si se desplazan a la izquierda pueden topar con el vehículo que vaya en el carril de al lado y si lo sortean por la derecha, se acabarán dando con la farola o la acera».

Además, añade que «en Valencia hay mucha humedad y estos badenes son peligrosos porque puedes perder el rozamiento y la estabilidad. Es preferible que cacen con fotos al que no cumpla que poner en peligro la vida de los conductores».

Despropósito

Un veterano componente de Valencia en Bici, Fernando Mafé, indica que «creo que ha sido una fórmula que han usado para salir del paso de las obras del carril bici de Gran Vía porque en la otra parte del puente sí está el carril separado». Añade que «todo el proyecto del carril bici es un despropósito y no veo seguro lo que han hecho». También detalla que las bicis podrán pasar por un lado, «pero si son triciclos, bicis de reparto o de personas con movilidad reducida pueden zozobrar».

Desde la entidad Stop Accidentes, Ana Novella, tampoco aboga lo apoya. «No lo veo adecuado y puede generar accidentes. Se pidió quitar en El Saler y ahora lo ponen en la ciudad, no se entiende. Deberían de optar por otras soluciones, como señales luminosas». Y añade que «será un peligro para las ambulancias.

Fernando del Molino, de la Federación Sindical del Taxi de Valencia y Provincia opina que «es un obstáculo más. Encima está en la parte derecha, por donde circulamos los taxis». Añade que «los amortiguadores de los coches sufrirán más y seguirán complicado el tráfico privado».

Por su parte, el concejal del Grupo Popular, Carlos Mundina, realizó ayer una visita al punto conflictivo y afirma que «está provocando salidas y entradas continuas del carril porque los conductores tratan de evitar este obstáculo». Recuerda que «en la CV-500 ya se tuvieron que retirar los cojines berlineses para evitar riesgos, pero pese a ello, Grezzi ha decidido instalarlos para en teoría proteger a los ciclistas que se atrevan a utilizar el carril bici desde el comienzo de Fernando el Católico». Y concluye que «están generando inseguridad a los conductores privados y del transporte público, así como a los motoristas y ciclistas».

Por otro lado, cabe destacar que si bien a principios de mes la empresa que crea el carril bici pidió una ampliación de días, ayer tal como indicaron desde Ciudadanos, se aprobó una ampliación del coste con 725,12 euros adicionales por elementos que han ido incluyendo en este carril bici donde no cesan las improvisaciones.

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