El Gulliver pedirá por megafonía estar sólo una hora cuando haya colas en la puerta

La limitación de una hora en el parque Gulliver se pondrá en marcha a través de la megafonía del recinto y cuando haya cola para entrar, según anunció este lunes el concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, quien consideró que es «lógico limitar el uso de la figura si hay gente esperando por una cuestión de solidaridad».

El enorme muñeco tumbado sobre el jardín del Turia abrió al público el 28 de octubre y el primer fin de semana ya se registraron aglomeraciones de público alrededor y sobre los toboganes. Esto movió a los responsables de la instalación a fijar un aforo máximo de 500 personas, a lo que se añade ahora la recomendación de que estén dentro una hora.

El Gulliver ha estado cerrado desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020 y reabrió quince meses más tarde, aunque sólo unas horas al detectarse que los niños sufrían rozaduras al tirarse por los toboganes. La decisión fue clausurarlo de inmediato y acometer su rehabilitación integral, ya prevista y que ha salido por un millón de euros. Ese es el motivo de que haya estado cerrado casi tres años.

Este fin de semana se celebró una fiesta dedicada a la infancia y el balance ha sido de una asistencia de 7.678 personas, con 3.738 el sábado y 3.940 el domingo, según fuentes de la concejalía de Ecología Urbana. Sobre los avisos de permanencia de una hora, indicaron que de momento seguirá siendo recomendación. «Vamos a ver cómo funciona y más adelante se decidirá si se mantiene o se pasa a otro tipo de medida. Pero lo primero es ver cómo funciona», precisaron.

El Gulliver se ha beneficiado de una remodelación completa, tanto en el interior del muñeco como en los toboganes e instalaciones alrededor. El pavimento se ha renovado y ha ocurrido lo mismo con la verja y jardinería del perímetro, que ahora permite ver mejor la zona de juegos. El acceso, junto al puente del Ángel Custodio, también se ha reformado con una nueva zona de picnic.

Todo es nuevo en la instalación creada por el arquitecto Rafael Rivera, el artista fallero Manolo Martín y el diseñador Sento Llobell. En el interior se han vaciado algunos almacenes y se ha puesto en valor las maquetas que enseñan toda la composición del personaje de la novela de Jonathan Swift.

Las obras se han completado con servicios que se han renovado como el de asistencia médica. La enfermería cuenta con una ambulancia disponible de manera permanente, según señaló el vicealcalde Sergi Campillo. En cuanto a las rozaduras, parece que han pasado a la historia dado que de momento no se han presentado incidencias de este tipo en las más de 20.000 personas que han pasado por el recinto desde su reapertura.

El Ayuntamiento ha enmarcado la reapertura del Gulliver en los actos del 35 aniversario del jardín del Turia, al menos de la puesta en servicio de los primeros tramos. En este contexto, el Organismo de Parques y Jardines tiene la intención de contratar un proyecto para la reforma de todo el viejo cauce, en cuanto a accesibilidad y otras mejoras.

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