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L. S.
Jueves, 13 de febrero 2020, 23:25
valencia. Defraudados. Así se sienten los representantes de las personas mayores y de la Federación de Vecinos de Valencia por los cambios de las líneas de autobuses previstos por el gobierno de Ribó. El defensor del mayor, José Pelegrí, explica que «hemos hablado ya con el Ayuntamiento para mostrar nuestro malestar y realizar nuestras propuestas pero no nos escuchan». Pelegrí añade que tendrían que tener en cuenta que «la movilidad tiene que ser para todos, no sólo el único que ellos imponen».
El defensor del mayor tiene claro que «los transbordos no son para personas mayores. Se van a desorientar, por no hablar lo que cuesta llegar hasta la parada y volver a subir al autobús».
Ante este panorama, propone que se queden las líneas como están hasta ahora. «Las cosas que funcionan bien no hay que moverlas, hay que cambiar las que están mal como la limpieza de los autobuses o la frecuencia». Y añade que «una cosa es que quiten los coches privados de la plaza del Ayuntamiento y de la Reina, pero los autobuses podrían llegar perfectamente».
Por su parte, desde la Federación de Vecinos de Valencia, Tania Cortés, del área de movilidad, opina que «nos presentan los cambios como maravillosos y no es así. En cambio no solucionan los problemas de frecuencia, por ejemplo, la línea 18 tiene una espera de 15 minutos. Y las personas con movilidad reducida no tienen un validador de billete en su zona de acceso».
Sobre los transbordos, detalla que «para las personas mayores será complicado y cada uno lleva su velocidad».
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