

Secciones
Servicios
Destacamos
El horizonte judicial para el exconcejal Sergi Campillo se despeja. El juzgado de instrucción número 16 de Valencia ha decidido archivar la causa abierta contra el que fuera edil de Ecología Urbana por la caída de un árbol que causó lesiones a una pareja y a sus hijos en Valencia. El auto, que no es firme y contra el que cabe recurso, acuerda el sobreseimiento libre de los hechos, por los que estaba también imputado el jefe de jardinería sostenible del Ayuntamiento. La familia ya ha acudido a la Audiencia de Valencia.
El accidente se produjo en el verano de 2021 en la plaza Pedagogo Pestalozzi del barrio de Monteolivete. La caída de una rama de grandes dimensiones dejó atrapados al matrimonio y a sus hijos. El caso se aparcó tras un atestado policial, pero el hombre decidió acudir a la justicia por la falta de atención del Consistorio.
El auto se dictó el pasado mes de junio, apenas unos días después de que el exedil acudiera a declarar. Y sus argumentos son diáfanos: no existe delito de lesiones imprudentes y «no deben aplicarse los preceptos penales», tal y como informan fuentes del Tribunal Superior. La jueza acepta así las alegaciones del Ayuntamiento de Valencia, y la compañía aseguradora, que habían pedido el archivo de la causa. La Fiscalía tampoco se había opuesto al sobreseimiento del asunto.
La base del pronunciamiento del juzgado para no aplicar la doctrina penal es que «el ordenamiento jurídico contiene mecanismos adecuados tendentes al restablecimiento de la situación perturbada». Es decir, de haber pasado algo (en cuyo fondo no entra el juzgado) hay otras maneras menos intervencionistas de solventarlo.
La magistrada recuerda en la resolución que las normas penales deben ser aplicadas de forma restrictiva y que el derecho penal ha de ser la «última ratio», es decir, el último recurso, según el Tribunal Superior.
La acusación particular, que representaba los intereses de la familia herida, había solicitado la práctica de varias diligencias para esclarecer el accidente. El juzgado señala en el archivo de la causa que estas pruebas no son «necesarias ni pertinentes».
«Se ha demostrado que fue un hecho fortuito. Esto pasa en todas las ciudades. No puede ser de otra manera. No hay ningún servicio de mantenimiento que pueda evitar esto», fueron las declaraciones de Campillo tras declarar en el juzgado. El edil subrayó durante el proceso que el árbol había sido revisado. Los operarios municipales no apreciaron riesgo aparente de fractura de ramas a corto plazo, como se señaló después del siniestro. La Audiencia de Valencia tiene la última palabra con el recurso.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Siete años de un Renzo Piano enredado
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.