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P. M.
Miércoles, 14 de diciembre 2022, 10:28
Operarios de la contrata municipal se afanaban este miércoles en limpiar los bajos del puente de las Flores, donde todavía se observa el rastro del incendio registrado el pasado día 4 cuando ardieron un montón de palés apilados en la parte recayente al paseo de la Alameda.
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El siniestro ha podido afectar a las grandes piezas de goma situadas entre el vano del puente y los pilares que lo sostienen, aunque eso está por determinar. El Ayuntamiento ha hecho catas en el hormigón y el acero de la estructura inaugurada en 2002, uno de los pasos más simbólicos del viejo cauce al esta presidido por miles de plantas en los laterales.
La reposición de estas plantas motivó la llegada de decenas de palés desde los viveros, que quedaron apiladas a la espera de su retirada. Antes de que esto sucediera, un incendio presuntamente intencionado los redujo a cenizas, estropeando un mural pintada en el pretil izquierdo y, no está claro todavía, dañando el propio puente.
De momento se ha prohibido el paso de vehículos de más de cuatro toneladas y se ha cortado al tráfico el carril central, lo que seguirá hasta que haya conformación de que los materiales están en óptimas condiciones. Se da la circunstancia de que la mayor parte del puente de las Flores es metálico.
Construido en el mismo lugar donde durante años estuvo en servicio un pontón provisional, es de dirección única y cuenta con un carril bici, al igual que dos pasos peatonales en los laterales construidos con pavimento de madera.
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