Llenan de pintadas la alquería dels Moros junto al parque de Benicalap

Con una rehabilitación que terminó en 2019, la Casa del Señor, la parte principal de la alquería dels Moros, ha amanecido estos días con las fachadas repletas de pintadas, un acto vandálico en un inmueble catalogado como Bien de Interés Cultural, la máxima protección, en un conjunto que los expertos consideran de lo más valioso que hay en Valencia en arquitectura rural que ha logrado sobrevivir.

La asociación Círculo por la Defensa del Patrimonio denunció estos hechos, así como la falta de respuesta por parte del Ayuntamiento. «Alertamos hace poco de la rotura de las cámaras de vigilancia», indicó el portavoz de la entidad, César Guardeño, sin que «haya constancia de que estén ya en funcionamiento». En la Casa del Señor se sitúa la sede del Consell de l'Horta, un organismo de nueva creación formado por la Generalitat y el Ayuntamiento.

Tanto la citada asociación como otras también preocupadas por la conservación del patrimonio cultural reclaman desde hace años que se complete el proyecto de rehabilitación. Todavía hay propiedades privadas en la alquería dels Moros, lo que complica todo mucho más debido a la lentitud de las expropiaciones.

Después de la construcción de un pequeño jardín y bosque entre el parque de Benicalap y estas alquerías, el Consistorio ha presentado la ampliación de la mayor zona verde del barrio, una iniciativa que llegará hasta la ronda norte, por el lado oeste de Ciutat Fallera.

Los planos han sido presentados, aunque todavía no hay presupuesto aprobado ni plazos para las obras. La idea es que tanto esta alquería como la alquería de la Torre y el Casino del Americano queden dentro del gran parque como dotaciones públicas. Hasta que llegue ese momento, Guardeño consideró que el Ayuntamiento «debe hacer mucho más para preservar este conjunto y lo primero es prevenir con videovigilancia los actos de vandalismo».

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