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P. M.
Martes, 23 de febrero 2021, 01:17
valencia. El arquitecto José María Lozano emitió un voto particular contrario a la decisión mayoritaria del pleno, al entender que las «llamativas incidencias administrativas no son irrelevantes», en relación a la tramitación que llevó hasta los derribos. «Manifiesta indecisión de los servicios municipales de Licencias Urbanísticas, Planeamiento y Patrimonio. Hasta tres Informes distintos en cinco días hábiles, y contradictorios entre sí, de la Dirección General de Cultura y Patrimonio, todos carentes del Informe técnico pormenorizado como es habitual».
También habló en su intervención del «retraso indebido en la tramitación del Plan Especial que se derivó a la Universitat en 2014; y la inmediatez de las actuaciones sin las cautelas oportunas y recomendables».
Recordó el «disgusto generalizado por la actuación entre entidades, académicos, expertos y profesionales representantes del mundo de la cultura arquitectónica y de la defensa del patrimonio cultural valenciano», como la «inmediata reacción crítica del Colegio Territorial de Arquitectos de Valencia y del Colegio Oficial de Arquitectos de la Comunidad», entre otras razones.
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