ÁLEX SERRANO
Valencia
Lunes, 23 de abril 2018, 23:17
El Síndic de Greuges ha enviado una recomendación a la Dirección General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat para que responda al grupo municipal popular, que hace casi siete meses envió un escrito en el que preguntaba por la marquesina del intercambiador de la EMT en la plaza de Tetuán, situado frente al Convento de Santo Domingo. En ese documento, el concejal Alberto Mendoza inquiría sobre por qué la Generalitat había dicho que no era necesaria una autorización expresa para instalar la marquesina en una zona que forma parte de un plan especial de protección del entorno. Ese escrito se envió el 29 de septiembre y no ha recibido respuesta, cuando están a punto de cumplirse siete meses desde que la petición fue remitida.
Publicidad
El Síndic recomienda a la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte de la Generalitat Valenciana que dice «resolución motivada» en contestación a los escritos presentados por el autor de la queja con fechas 29 de septiembre y 3 de octubre de 2017. El Síndic da un plazo al departamento que dirige Vicent Marzà. El defensor del pueblo valenciano dice que el silencio administrativo «es una práctica que genera en los ciudadanos una auténtica inseguridad jurídica e indefensión material».
La conselleria respondió el 4 de octubre con un informe en el que se da trámite a la solicitud del grupo municipal popular desestimándola, como critica Mendoza. «Sin embargo la directora general de Patrimonio y Cultura sigue sin responder a nuestros escritos que se le han remitido a ella personalmente como responsable directa, Dirección General a la que también se ha dirigido el Servicio de Cultura del Ayuntamiento de Valencia para recabar la autorización que la Comisión Técnica del Patrimonio del Ayuntamiento dictaminó como imprescindible para la instalación de las marquesinas de la EMT en la plaza de Tetuán, donde siguen instaladas sin ninguna autorización ni municipal ni autonómica desde abril de 2017», explica el PP.
Mendoza criticó ayer que la isleta se instaló hace un año «sin permiso», así como «una marquesina que atenta contra la ley de Patrimonio de Comunitat Valenciana en una zona con un alto grado de protección». «Ribó y la Dirección General de Patrimonio y Cultura son co-responsables de esta situación en la que los dos miran para otro lado cometiendo una irregularidad manifiesta», denunció el concejal, que destacó que la Generalitat no emite el informe «porque sabe que va a ser negativo». Mendoza recuerda que este 5 de mayo «hará un año» que el concejal de Movilidad Sostenible «tiene pendiente la firma de resolución de autorización de esa marquesina y si no la firma por algo será».
Estas marquesinas forman parte de la estrategia de la EMT de crear intercambiadores desde los que en un futuro se accederá al centro de la ciudad. Además de las marquesinas frente a Capitanía, se han instalado otros intercambiadores en la Porta de la Mar y hay varios puntos más planteados, como por ejemplo la calle Ángel Guimerà. Sin embargo, por el momento funcionan como paradas con varios autobuses desde las que salen otras líneas pero no integradas por autobuses pequeños y menos contaminantes como prometió el concejal Giuseppe Grezzi en la Mesa de la Movilidad en 2016.
Publicidad
Suscríbete a Las Provincias al mejor precio: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.