Una mujer da a luz a un niño en un autobús de la EMT asistida por su marido y el pasaje

Eran las 7.30 de la mañana de un día cualquiera. Rostros cansados, personas que han madrugado para ir al trabajo… Entre los pasajeros del bus de la línea 93 había una mujer acompañada de su marido que se ha subido al vehículo cerca del Paseo Marítimo sin saber que iba a dar a luz a su hijo allí mismo. «Cuando ha subido al autobús le he visto que tenía una expresión de dolor pero supuse que iría a hacer un transbordo para alguna prueba médica», cuenta Antonio Rodríguez, el chófer.

Todo ha ocurrido en cuestión de instantes. Aquella expresión de dolor se ha convertido en unas contracciones que anunciaban el parto. Una chica ha ido a avisar al conductor de que había una mujer que se encontraba mal. Pronto ha vuelto a la cabina, la situación había cambiado. Unos segundos más tarde, la mujer le ha informado de que la pasajera había roto aguas y se había puesto de parto llegando al final de la Avenida de Tarongers.

Ha sido tan repentino que en apenas 5 minutos ha nacido el bebé, asistido en principio por el padre y después por todo el pasaje. En ese momento ha decidido salirse de la ruta: «he informado a los pasajeros de que se rescindía el servicio y que íbamos directos al hospital». El chófer ha avisado al servicio de transportes para que redirigieran la llamada al 112 pero ha sido tan rápido que han logrado llegar al hospital Clínico antes de que se efectuara la llamada. «He ido lo más rápido que he podido a la puerta de Urgencias, pitando para que el resto de coches nos dejaran pasar y para que viniera algún sanitario que estaba en la puerta», relata Antonio.

Y ha conseguido salvar esas dos vidas. «Cuando he oído llorar al bebé y he visto que todo estaba bien me he sentido muy feliz», cuenta con ternura el chófer. En los 23 años que lleva trabajando en la EMT nunca había presenciado ninguna escena similar. Por suerte, tanto el niño como la madre se encuentran bien. Al ver que la mujer ya había dado a luz, ha puesto todo su empeño en que recibiera asistencia médica lo antes posible.

Una vez han llegado al hospital, todos los pasajeros se han puesto a aplaudir al conductor por su rápida actuación y se han involucrado para ayudar a la mujer. «Esto no lo voy a olvidar en la vida», cuenta Antonio. El matrimonio está muy agradecido por la ayuda que les ha prestado el chófer de la EMT.

Una vez que ya han entrado en el hospital ha retomado su ruta y ha seguido con su jornada laboral, ante una nube de periodistas que se arremolinaban para que narrara su hazaña. La mujer ha preferido seguir en el anonimato y ha decidido no dar declaraciones a los medios. Eso sí, en su rostro se reflejaba la ternura de poder abrazar a su bebé gracias a la colaboración ciudadana. Cerca de una treintena de pasajeros que llegaban tarde a sus obligaciones pero han decidido volcarse en ayudar a la mujer.

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