Joaquín y Pilar señalan una madriguera en los bajos de un edificio del barrio. lp

«Por la noche oyes a las ratas en la calle»

El Ayuntamiento admite el problema y promete trabajar en la desratización de la barriada tras la visita de Fernando Giner La Fuensanta clama ante las plagas de roedores que entran en los edificios

ÁLEX SERRANO

Viernes, 30 de septiembre 2022, 23:53

valencia. La visita del portavoz municipal de Ciudadanos, Fernando Giner, a la Fuensanta este viernes ha sacado a la superficie, y nunca mejor dicho, un problema con cuatro patas, una cola larga y mucho pelo: las ratas. Un recorrido por el barrio construido tras la riada de 1957 evidencia que los viejos edificios franquistas están repletos de roedores que complican tanto el día a día que los vecinos han comenzado a recoger firmas. «Por las noches las oyes en la calle y todo parece una alfombra de ratas», lamenta Pilar, la vecina que ha empezado a buscar apoyos en el barrio.

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Aunque el problema afecta a toda la zona, es más acuciante en los edificios cerca de Tres Forques. Es ahí donde Pilar y Joaquín Otero, el presidente de la Asociación de Vecinos de la Fuensanta, lamentan que el problema «está dentro de las mismas casas». «Las oyes en el techo y se comen los cables de la luz», critican. Otro grupo de residentes aseguran que han tenido que cambiar dos veces las tuberías de casa porque las ratas «los roen y los dejan llenos de agujeros», según comenta Maricarmen. Otro joven asegura que esos problemas también se dan en los coches: «Se comen los manguitos y luego no arrancan».

Giner visitó la barriada y tildó de «absoluta vergüenza» el exceso de ratas. «En Fuensanta, los vecinos han llegado a contar más de 200 ratas en media hora, pero el Ayuntamiento no hace nada al respecto. Tanto es así, que han tenido que iniciar una recogida de firmas porque la situación es insostenible», ha censurado. Así, Giner ha recogido diversos testimonios de los vecinos, que corroboran el serio problema que han tenido a lo largo de los últimos meses con las ratas: «Una de ellas nos ha explicado que han tenido que ir con sus propias manos a tapar alcantarillas y agujeros en el suelo para impedir que las ratas sigan saliendo. Los animales van en tropel a los contenedores de basura, e incluso se cuelan en sus casas, para desesperación de los vecinos». «No hacen más que denunciarlo, una y otra vez, pidiéndole a este Ayuntamiento que vaya de una vez por todas a hacer un control de plagas. Pero, de momento, las quejas caen en saco roto», critica Giner. Desde el Consistorio, fuentes de la concejalía de Sanidad aseguran que son conscientes del problema y están trabajando en ello, pero los vecinos alertan de más reuniones con la oposición antes de las elecciones para solucionarlo.

«La cosa es tan grave que ni siquiera pueden dormir tranquilos por las noches. Ya no solo es el miedo de que se les cuelen en casa, es que además tienen que escuchar sus ruidos a todas horas, recordándoles que están ahí. Y, por supuesto, el problema de la falta de poda en algunas zonas no hace más que agravar la situación», dice Giner, que denuncia que las ratas «hacen sus nidos en los árboles y en los setos que no están bien podados, y van saltando de una rama a otra como les viene en gana».

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